Política

Nuevos alcaldes

Char se la juega por una Barranquilla más segura y de mucha altura

El nuevo alcalde de La Arenosa decidió seguir trabajando con gran parte del equipo que inició hace ocho años la labor que ha seguido la actual mandataria.

Alejandro Char y Elsa Noguera / Foto: prensa Alcaldía de Barranquilla

Alejandro Char y Elsa Noguera / Foto: prensa Alcaldía de Barranquilla

Barranquilla

Con la llegada del año nuevo, llega igualmente una nueva administración y un nuevo personal encargado de la seguridad, tema este considerado como el mayor desafío para Barranquilla y sus autoridades.

El auge que ha tenido la ciudad en los últimos años no solo le ha permitido que más inversionistas se muestren interesados en abrir aquí sus negocios, que la banca se muestre confiada en abrir cupos de endeudamiento y que la gente se sienta orgullosa de su ciudad.

Paradójicamente todo ese avance ha venido acompañado de sucesos que muestran a una ciudad insegura, una ciudad en la que los atracos al ciudadanos en las calles, los asaltos a locales comerciales y la pugna entre bandas delincuenciales por asegurar su espacio de acción, marcan su día a día.

Y si bien los avances y el cambio de la ciudad le han dado a la saliente mandataria, Elsa Noguera, el carácter para mostrarse como una de las mejores administradoras de ciudad durante este período, en el país, ella misma reconoce que en materia de seguridad reprobó.

Por eso el entrante mandatario, Alejandro Char, tiene sobre sus hombros la nada fácil tarea de mostrar a Barranquilla como una ciudad confiable no solo para los inversionistas nacionales y extranjeros, sino para el ciudadano común que vive con la zozobra de que algo le pueda pasar al salir de su casa cada día.

Pero además de la seguridad hay dos tremas que hacen parte de las tares a sacar adelante la nueva administración de la ciudad: movilidad y espacio público.

El tema de la movilidad se convertido en un dolor de cabeza para el barranquillero y ello se debe especialmente al incremento en el número de los vehículos que circulan por sus calles y la falta de una adecuada infraestructura vial.

En cuanto a espacio público, si bien hubo un avance significativo en cuanto a la recuperación y apertura de parques y plazas, la ocupación de andenes y zonas peatonales por parte del comercio informal, constituyen un verdadero lunar para la ciudad.

Para muchos el tema ha ido creciendo por falta de autoridad, aunque las administraciones de turno han implementado estrategias para reubicación de ventas, especialmente en el distrito central de la ciudad, han faltado estrategias para evitar que los espacios recuperados sean nuevamente tomados.

Alejandro Char, quien se posesiona con un evento en uno de los sectores más populares y de mayor incidencia de inseguridad de la ciudad, tiene a partir de este primero de enero el gran reto de hacer que Barranquilla siga creciendo, que siga siendo competitiva y, sobre todo, una ciudad más segura.

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