Ventas en establecimientos nocturnos de Boyacá caen un 35%
Tunja, Duitama y Paipa, las ciudades más afectadas. Se contemplan despidos o cierres temporales mientras se recupera la economía.

Comerciantes preocupados ante la caída en las ventas durante el segundo semestre del año
Los establecimientos nocturnos de Boyacá atraviesan una de sus peores temporadas del año.
Según Asobares Boyacá, las ventas han caído en promedio un 35%, afectando de manera crítica a bares, discotecas y gastrobares en ciudades como Tunja, Duitama y Paipa, donde la reducción del consumo ha golpeado con mayor fuerza al sector.
Yaneth López, presidenta de Asobares Boyacá, explicó que la disminución en las ventas obedece a varios factores, entre ellos la reducción del poder adquisitivo de los consumidores, el incremento de costos operativos y los recientes episodios de orden público que han generado menor afluencia nocturna.
“El sector está pasando por un momento muy complejo. Los establecimientos no están logrando cubrir sus gastos fijos y muchos empresarios evalúan cerrar temporalmente, además las disposiciones de ley seca ante elecciones de consejos de juventud y de consultas de los partidos, dejan a los establecimientos sin poder ofrecer el servicio”, aseguró.
La dirigente señaló que, además de la caída en ingresos, la temporada decembrina —tradicionalmente una de las más fuertes para el sector— no ha logrado despegar.
En Tunja, los propietarios hablan de noches con aforos por debajo del 50%; en Duitama, algunos negocios reportan ventas similares a días de baja demanda; y en Paipa, el turismo interno no ha sido suficiente para compensar la reducción del consumo local.
Asobares hace un llamado a las autoridades municipales y departamentales para articular acciones que impulsen el sector, incluyendo estrategias de seguridad, alivios tributarios y campañas que promuevan el consumo responsable en espacios formales.
“En Tunja y Paipa por ejemplo, hay aguinaldos, que concentran a la gente en estos eventos, y no es que estemos en desacuerdo, solo que pedimos a las administraciones que articulemos acciones para que los propietarios de los establecimientos tengan oportunidad de venta”.
La asociación confía en que, con apoyo institucional y mejoras en el entorno económico, los establecimientos nocturnos puedan recuperarse durante el primer trimestre de 2026.
“El sector nocturno es un motor de empleo y dinamiza la economía urbana. Necesitamos medidas urgentes para evitar más cierres y preservar miles de puestos de trabajo”, destacó López.



