“Vendieron parcelas que no eran suyas”: Estado recupera y entrega tierras en Puerto Boyacá
Tras décadas de despojo y ocupación ilegal, el Gobierno Nacional recuperó 3.040 hectáreas en Puerto Boyacá antiguo centro de entrenamiento paramilitar y las entregó a 310 familias campesinas.

El Gobierno Nacional recuperó 3.040 hectáreas en Puerto Boyacá antiguo centro de entrenamiento paramilitar y las entregó a 310 familias campesinas
Puerto Boyacá
El director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), Felipe Harman, denunció que campesinos de la región fueron engañados por particulares que, sin ningún vínculo con el Estado, les vendieron parcelas ubicadas en predios de la Nación, vinculados históricamente al conflicto armado y a la conformación de los primeros grupos paramilitares.
“Un particular terminó embaucando a decenas de campesinos, vendiéndoles parcelas que no eran suyas, sino bienes del Estado. Esas personas fueron víctimas de una nueva forma de despojo y hoy estamos aquí para frenar ese abuso”, advirtió Harman. “Hay supuestos líderes que les cobran a los campesinos por tierras que hacen parte de la Reforma Agraria. Eso es un delito y lo vamos a denunciar”.
Las declaraciones se dieron durante un acto sin precedentes en el municipio de Puerto Boyacá, donde el Gobierno del Cambio, en nombre del Estado colombiano, entregó 3.040 hectáreas de tierra a 310 familias campesinas, en lo que constituye una reparación histórica y un paso firme hacia la transformación del Magdalena Medio.
Se trata de 17 predios que, en el pasado, fueron epicentro de operaciones paramilitares. Allí, según registros históricos, el mercenario israelí Yair Klein entrenó a los hermanos Castaño y a los primeros grupos de autodefensas, en alianza con narcotraficantes como Pablo Escobar y Gonzalo Rodríguez Gacha, alias ‘El Mexicano’. En estas tierras, miles de campesinos fueron asesinados, desplazados y despojados.
Ahora, estas fincas son adjudicadas a organizaciones campesinas como parte de un proceso liderado por la ANT, en conjunto con la Sociedad de Activos Especiales (SAE), el Fondo para la Reparación de las Víctimas y el acompañamiento de la Policía Nacional.
“Recuperamos a Cimitarra, Puerto Berrío, y ahora estamos en Puerto Boyacá porque el Magdalena Medio es una región priorizada para la Reforma Agraria. Es territorio campesino y popular, nunca más territorio paramilitar”, aseguró Felipe Harman.
Esta entrega significa mucho más que acceso a la tierra. Es un acto de justicia histórica, en un lugar que alguna vez fue conocido como la “capital antisubversiva de Colombia”. Hoy, Puerto Boyacá avanza para convertirse en la capital de la Reforma Agraria, como símbolo del compromiso estatal con la reparación, la legalidad y la dignidad del campesinado colombiano.




