Cartagena

Diversas voces en Colombia han alertado de la posibilidad de un apagón general, en el corto plazo, similar al ocurrido entre marzo de 1992 y febrero de 1993, debido a la reducción de los embalses en esa época. Este fenómeno natural ha vuelto a vislumbrarse en los últimos meses, lo que avivó la preocupación en la región Caribe.

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La situación se agrava ante la falta de gas natural para garantizar el abastecimiento en el país y las dificultades que han tenido las empresas de energía eléctrica por las grandes deudas que tiene el Gobierno nacional por los subsidios, la opción tarifaria y las entidades oficiales.

Ricardo Arango, gerente general de Afinia, destacó que el apagón es una realidad inminente mientras el Gobierno del presidente Gustavo Petro no pague una deuda que, junto a la que deben otras entidades oficiales, asciende los $2,5 billones, por subsidios a la energía de estratos bajos que presta la empresa.

Por ende, los alcaldes de Cartagena, Sincelejo y Montería expresaron su preocupación ante el eventual apagón; y consultaron sobre un posible plan de contingencia frente a esta amenaza latente.

En respuesta, Ricardo Arango, gerente de Afinia, replicó: “Todos tenemos un rol en la solución integral. Hay razones técnicas, económicas, modelos de negocio insostenibles, causas sociales, entre otras dinámicas que nos convierten a todos los actores en corresponsables. Por eso adhiero a la invitación a fortalecer la comunicación con alcaldes, gobernadores y usuarios en una situación apremiante: la gran deuda que tiene el Gobierno nacional con nuestra empresa”.

“La mayor satisfacción de un gobernante es solucionar un problema; pero, cuando esta situación escapa de su control, lo que queda uno es aburrido. La respuesta a gran parte de este problema está en el Gobierno Petro. ¿El presidente va a pagar? No quiero ser pregonero del desastre; sin embargo, considero que ya toca explorar acciones judiciales en busca de respuestas y soluciones”, afirmó Dumek Turbay, alcalde de Cartagena.

El mandatario le preguntó a sus colegas de Montería y Sincelejo si es hora que la Liga de Alcaldes del Caribe explore acciones legales contra el Gobierno nacional. “De la angustia deberíamos pasar a solicitarle al nuevo ministro de Minas y Energía que nos diga algo: una petición que como Región Caribe sería más potente que cualquier solicitud individual”, agregó Turbay.

Afinia pide apoyo a la Liga

Con relación al eventual apagón, el gerente de Afinia pidió el apoyo de la Liga de Alcaldes del Caribe para solicitar el apoyo del Gobierno nacional con el pago de sus deudas; así como también los mandatarios insten a las entidades públicas de la región a ponerse al día. Con esto, según Arango, se mitigaría en gran medida el riesgo de racionamientos, pues Afinia tendría más recursos para comprar energía en la bolsa.

“Sería muy conveniente que los alcaldes nos acompañen a jornadas de socialización, contextualización y sensibilización de las posibles soluciones propuestas para evitar apagones o racionamientos. La idea es dar opciones, establecer medidas prepago, modernizar redes y subir el porcentaje de recaudos que nos permita comprar más energía y minimizar horas de apagón, o que simplemente no haya racionamientos en ciertas comunidades”, precisó Ricardo Arango, en representación de Afinia.

Y agregó: “La Liga puede ser un mecanismo de cohesión y homologación de intereses; y nos ayuden a interceder con la Nación.