En Risaralda buscan erradicar los matrimonios infantiles y disminuir los embarazos en adolescentes

Si bien no hay registros oficiales de este tipo de matrimonios en el territorio, no se desconoce su existencia, y es que solo en el 2024 se reportaron un total de 45 embarazos en niñas entre los 10 y 14 años de edad, de los cuales 12 correspondían a menores indígenas entre los 13 y 14 años.

En este mismo periodo, se registraron un total de 1.095 partos de jóvenes entre los 15 y 19 años de edad, de los cuales 239 eran indígenas.

Ante estas cifras, la Gobernación de Risaralda ha propiciado varias mesas de trabajo con la participación de entidades como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), esto para analizar el panorama del matrimonio infantil, uniones tempranas y forzadas en el terriotorio, y a su vez estrategias que permitan erradicar estas practicas.

Indicaron las autoridades que estas jornadas se enmarcaron dentro de un estudio más amplio que prioriza a Risaralda, Cauca y La Guajira, debido a sus altos índices de violencia basada en género y la presencia de comunidades indígenas, donde este fenómeno sigue siendo una preocupación latente.

María Cristina Botero Mejía, enlace de Derechos Humanos de la Dirección de Gobernanza y Democracia de la Gobernación de Risaralda, amplió detalles sobre estos encuentros, y aseguró que muchas niñas aceptan estas uniones porque creen que es la única salida para tener estabilidad económica o escapar de situaciones familiares difíciles.

“Durante los días 17 y 18 de febrero se realizaron tres espacios de conversación en los que participaron niñas, adolescentes, mujeres, lideresas, líderes comunitarios y funcionarios públicos. En estos encuentros se recogieron testimonios y se identificaron factores socioculturales que perpetúan los MIUTF, así como barreras que enfrentan las comunidades para erradicarlos”, indicó Botero.

Colombia ocupa el puesto 20 a nivel mundial con respecto al número de niñas casadas o unidas antes de cumplir los 15 años, y en América Latina y El Caribe ocupa el puesto 11 en adolescentes unidas antes de cumplir los 18 años.

El diputado Durguez Espinosa, explicó que en el 2018 la Unicef reportó que en Colombia más de 453 mil niños fueron obligados a contraer matrimonios o relaciones no consentidas.

Como conclusiones de estas mesas de trabajo, las autoridades evidenciaron que en Risaralda los matrimonios infantiles en primer lugar no son denunciados, por lo que no hay registros; también que están estrechamente ligados a la desigualdad de género, la falta de acceso a educación y la reproducción de normas socioculturales que normalizan estas uniones.

En el caso de las comunidades indígenas, identificaron la necesidad de abordar esta problemática desde un enfoque intercultural que respete las tradiciones, pero garantizando los derechos de niñas y adolescentes.

Finalmente plantearon la necesidad de mayor articulación entre el sector salud, educación y organizaciones sociales para implementar programas de sensibilización y prevención.