Entró en funcionamiento la primera Comunidad de Conectividad del departamento de Boyacá
Boyacá es pionero en el país en Comunidades de Conectividad que prestarán servicio de internet en zonas rurales

El programa beneficiará a las zonas rurales donde no cuentan con acceso a internet. Foto | Captura de pantalla Secretaría TIC
Otanche
El departamento de Boyacá inició la implementación de un proyecto de conectividad rural que beneficiará a 3.150 hogares en 62 municipios, con una inversión de $ 13 mil millones del Ministerio de las TIC. La iniciativa, gestionada por el gobernador Carlos Amaya, busca llevar internet fijo a comunidades rurales a través de un modelo comunitario, similar al de los acueductos veredales.
El proyecto, que comenzó en la vereda El Carmen, en Otanche, y se extenderá a otras zonas rurales como en Pisba, donde hay que viajar por cuatro horas a lomo de mula, utiliza tecnología satelital para brindar acceso a internet en áreas donde las empresas tradicionales no llegan. Sandra Urrutia, secretaria TIC y de Gobierno Abierto de Boyacá, explicó que este modelo se basa en la participación activa de las comunidades. «Este es un proyecto que refleja la filosofía de los acueductos comunitarios, donde la propia comunidad gestiona un servicio público esencial, en este caso, el internet», señaló Urrutia.
La funcionaria destacó que, durante el 2024, se realizaron capacitaciones para formar a los habitantes en la gestión del servicio. «Hemos formado capacidades en las comunidades para que sepan cómo facturar, vender el servicio, hacer mantenimiento preventivo y correctivo, y manejar los niveles de escalamiento un servicio público esencial, en este caso, el internet», afirmó. Además, mencionó que el proyecto incluye una fase de apropiación tecnológica, donde jóvenes y adultos de las veredas son entrenados para operar y mantener los equipos.
Urrutia resaltó el caso de Santiago, un niño de la vereda El Carmen, quien será el técnico encargado de la comunidad. «La meta es que durante todo el proceso de implementación, las comunidades adquieran habilidades para manejar la tecnología de manera responsable», explicó. También mencionó que el proyecto busca impulsar no solo habilidades digitales, sino también productivas, aprovechando el potencial turístico y agrícola de las regiones.
Según Sandra Urrutia, «este proyecto ilusiona mucho porque le da a nuestras comunidades la posibilidad de manejar la tecnología y encadenarla con su productividad». Con una inversión considerable y un enfoque comunitario, la iniciativa promete transformar la vida de miles de boyacenses, acercándolos a las oportunidades que ofrece el mundo digital.