¿Qué tiene más azúcar: un vaso de gaseosa o de jugo de naranja? Diferencias según nutricionistas
Es importante que conozca lo que está tomando y sus efectos en el cuerpo.

Gaseosa y jugo de naranja, imágenes de referencia (Getty Images).
El azúcar cuenta con gran reconocimiento, a nivel gastronómico, por su capacidad para realzar sabores y equilibrar la acidez y amargor de las preparaciones. Es un ingrediente adaptable, que le aporta, en gran medida, a postres, bebidas y salsas.
Un aspecto que es importante tener en cuenta es que el azúcar es una fuente rápida de energía, debido a que se descompone en glucosa, el combustible principal de las células.
Además, activa el sistema de recompensa del cerebro, liberando dopamina y creando una sensación placentera que puede resultar en un alto consumo.
Es un ingrediente barato y fácil de conseguir, debido a su producción masiva a partir de caña de azúcar y la remolacha. Su bajo costo lo hace atractivo para la industria alimentaria, que lo utiliza como conservante y potenciador de sabor.
Por otra parte, su presencia en productos ultraprocesados contribuyó a su relación con problemas de salud, como enfermedades cardiovasculares, obesidad y diabetes.
El abuso en el consumo de este producto ha sido impulsado por intereses mercantiles, lo que generó un debate mundial, enfocado en la regulación y consumo responsable del azúcar.
Un producto placentero, pero dañino
Más allá de su asociación con la obesidad, el consumo excesivo de este producto afecta negativamente al microbioma intestinal.
El azúcar puede alterar la composición de las bacterias intestinales, lo que favorece el crecimiento de aquellas que influyen en la inflamación y enfermedades metabólicas.
Cabe destacar que este ingrediente no solo se esconde en los postres, sino que se encuentra de forma oculta en alimentos procesados, como salsas y pan, entre otros.
También es importante mencionar que, según estudios recientes, el azúcar también puede incidir en el envejecimiento. Esto se debe a un proceso llamado glucación, que deteriora las proteínas en el cuerpo, afecta la piel y los órganos.
Adicionalmente, puede interferir con el funcionamiento del sistema inmunológico, lo que debilita las defensas y aumenta el riesgo frente a infecciones.
¿Qué tiene más azúcar: un vaso de gaseosa o de jugo de naranja?
La gaseosa generalmente contiene más azúcar que el jugo de naranja. No obstante, la cantidad tiende a variar, según la marca y el tipo de producto.
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En principio, una medida aproximada para una lata de gaseosa de 355 ml es de 39 gramos de azúcar. Por otro lado, un vaso de jugo de naranja de 240 ml contiene entre 20 y 25 gramos de azúcar natural, directamente presente en la fruta.
Desde un enfoque nutricional, hay que considerar que una de las principales diferencias es que el azúcar en el jugo de naranja es de tipo fructosa, por ende, es más natural y contiene nutrientes como la vitamina C, antioxidantes y hasta minerales.
Ahora bien, el jugo de naranja también carece de fibra, que queda en los residuos comúnmente desechados. Esto quiere decir que el azúcar se absorbe rápidamente, elevando los niveles de glucosa en la sangre.
Del otro lado, la gaseosa tiene azúcar añadida, generalmente en forma de jarabe de maíz de alta fructosa, de alguna forma, se puede decir que no aporta nutrientes.
Finalmente, como se mencionó previamente, el exceso de azúcar añadido en las gaseosas está asociado con un mayor riesgo de enfermedades metabólicas como la diabetes y la obesidad.