Estado actual de embalses en Bogotá y Cundinamarca: niveles tras alerta de la CAR en Chingaza
Los embalses que conforman el páramo de Chingaza continúan con tendencia descendente agudizando la crisis hidricia que atraviesa la capital colombiana.
Recientemente, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) lanzó una nueva alerta sobre una disminución sostenida en los niveles de agua de los embalses que abastecen de agua a Bogotá y a 11 municipios aledaños de La Sabana.
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De acuerdo con la entidad, en las últimas semanas, el Sistema Chingaza, compuesto por los embalses de Chuza y San Rafael, pasaron de estar al 46,78% al 46,64%. Chuza es el más perjudicado, con una disminución del 38,32% al 38,20%. Mientras que el de San Rafael se mantiene con por arriba del 70%, pero con una tendencia a la baja.
Las alarmas también se encendieron sobre los embalses del Agregado Norte (Chisacá y Regadera) con un nivel crítico por debajo del 54%. Al respecto, el director de la CAR, Alfredo Ballesteros, reiteró la necesidad de continuar con las medidas de ahorro para frenar la crisis hídrica que se está agudizando en el inicio del 2025, en un escenario incierto frente a la temporada de sequía en Colombia que podría extenderse hasta abril de 2025.
“Las lluvias no están cayendo en donde deben de caer”, comentó el funcionario, refiriéndose a las lluvias que tuvieron presencia en más de 20 departamentos en la última semana, pero en Cundinamarca no llegaron a los embalses por ser ecosistema de alta montaña.
Tal como explicó la CAR, los embalses se alimentan de una o más corrientes hídricas, por tal razón su ascenso o descenso de nivel depende de la cantidad de agua que entre al vaso y del caudal descargado por estos sistemas. Lo anterior significa que la cantidad de agua dependerá del régimen de lluvias y de las condiciones climáticas de una determinada zona o región.
Cada año, los embalses se recargan con el fin de que esas aguas sean utilizadas en el año siguiente, por esta razón, la situación para el 2025 sigue siendo delicada. Desde la Alcaldía de Bogotá aseguraron que es necesario continuar con el uso eficiente del agua para evitar un posible desabastecimiento irreversible.
Continúa el racionamiento de agua en Bogotá
De acuerdo con el Distrito, la meta al finalizar el 2024 era alcanzar el 75% de capacidad del Chingaza para proporcionar una mayor seguridad hídrica y reducir la vulnerabilidad ante eventos climáticos extremos como la temporada seca. No obstante, con corte al 30 de diciembre este cuerpo de agua se ubicó en un 46,73 %.
En los últimos meses, el alcalde Carlos Fernando Galán ha enfatizado en que los capitalinos deben reducir el consumo diario a 15 metros cúbicos por segundo, incluso sin cortes para así mejorar la situación hídrica. Según los recientes reportes de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, EAAB -, esa meta no se ha cumplido en meses, aunque para las vacaciones de la temporada de fin de año, el dato sí llegó a 14,26 metros cúbicos por segundo.
Hasta el momento, la capital seguirá con los nueve turnos de racionamiento diarios divididos por 9 zonas, que se alternarán en cortes totales del servicio durante 24 horas. Conviene aclarar que la división no es por barrios, sino por las zonas que comprenden la configuración hidráulica del sistema de acueducto. Estas son:
- Turno 1: 286 barrios en 10 localidades de la franja nororiental y centro de la ciudad. Antonio Nariño, Barrios Unidos, Chapinero, Los Mártires, Puente Aranda, Rafael Uribe Uribe, Santa Fe, Teusaquillo, Tunjuelito y Usaquén.
- Turno 2: 311 barrios en dos localidades en el occidente de la capital: Engativá y Fontibón, y la zona industrial de Cota.
- Turno 3: 610 barrios en tres localidades en el norte de Bogotá: Barrios Unidos, Suba y Usaquén.
- Turno 4: 593 barrios en cinco localidades en el suroccidente capitalino: Bosa, Ciudad Bolívar, Kennedy, Puente Aranda y Tunjuelito; además el sector de Cazucá y Soacha.
- Turno 5: 614 barrios en seis localidades del suroriente de la ciudad: La Candelaria, Ciudad Bolívar, Rafael Uribe Uribe, San Cristóbal, Santa Fe, y Tunjuelito.
- Turno 6: 335 barrios en la localidad de Suba, en el noroccidente de Bogotá. Suba y Ciudad Bolívar; además del municipio de Soacha.
- Turno 7: 215 barrios en las localidades de Fontibón y Kennedy. Además puntos de suministro de los municipios de Funza, Madrid y Mosquera.
- Turno 8: 555 barrios en nueve localidades distribuidas entre el suroccidente de la capital y el margen oriental, sobre los cerros. Antonio Nariño, Bosa, La Candelaria, Chapinero, Kennedy, Los Mártires, Rafel Uribe Uribe, San Cristóbal, Santa Fe y Usaquén y los puntos de suministro de La Calera y Arboretto.
- Turno 9: 89 barrios en dos localidades del norte de Bogotá: Usaquén y Suba y los puntos de suministro de Chía, Cajicá, Cojardín, Sopó y Tocancipá.
Como ha sido habitual desde su implementación en abril de 2024, para cada turno el restablecimiento del servicio comenzará a las 8:00 a.m. del siguiente día y la normalización total podrá tomar algunas horas adicionales teniendo en cuenta las características técnicas de cada sector.
Nivel de los embalses HOY 13 de enero de 2025
Los niveles de embalses del páramo de Chingaza, encargados de la mayoría del abastecimiento de los bogotanos, amaneció con reportes más críticos que los señalados anteriormente. Con corte a este lunes 13 de enero, el Sistema Chingaza alcanza el 46,32% con una tendencia descendente: Chuza con el 37,89% y San Rafael con 73,74%.
De continuar con esta tendencia, la capital podría enfrentarse a la medida del “Día cero” que se decretará cuando el Chingaza llegue al 36%, agudizando el racionamiento diario.
Ahora bien, los demás embalses de Cundinamarca también presentaron en su mayoría cifras con tendencia descendiente a excepción del Agregado Sur. En el caso del Agregado Norte compuesto por el Neusa, Sisga y Tominé, los niveles están en: 81,03%, 69,82% y 47,63% respectivamente.
Los embalses Chisacá y la Regadera que hacen parte del Agregado Sur permanecen estables con una capacidad total del 97,51%. Por último, el Hato, ubicado en jurisdicción del municipio de Carmen de Carupa sobre la vía que de Zipaquirá conduce a Ubaté, registra una capacidad de llenado del 85,35%.
Para este 2025, la administración local junto a la Gobernación de Cundinamarca anunció otras medidas para hacerle frente a la crisis, como estudios en los municipios de Sopó, Cajicá, Gachancipá, Chía, Cota, Funza, Mosquera, Madrid, Facatativá y La Calera con el fin de detallar las fuentes hídricas de abastecimiento subterráneo para la toma de decisiones en cuanto a la identificación de oportunidades, limitantes y dificultades para afrontar en materia de abastecimiento de agua en la zona.
En las últimas horas, el gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, reveló las posibles fechas para construir 10 pozos profundos en la región que alivien la presión sobre el sistema de embalses que actualmente abastece a 11 municipios del departamento.
Según explicó, el objetivo es tener los estudios listos en el mes de mayo y posteriormente, durante este mismo año, adelantar las licitaciones respectivas para poder iniciar con la construcción de tres de estos pozos. Agregó que, los otros siete pozos quedarían pendientes para ser licitados entre el 2026 y el 2027. Además, señaló que el objetivo es que cada uno de estos espacios pueda aportar entre 70 y 100 litros de agua por segundo.