Juan Camilo Cárdenas: los retos para establecer una economía sostenible en Colombia

La crisis climática sigue marcando la agenda global. Solo en el 2024, se rompió el récord del día más caluroso jamás registrado en la historia del mundo. Además, se presentaron graves desastres naturales como sequías, incendios, inundaciones, huracanes y derrumbes que dejaron miles de víctimas en una larga lista de países.

En el camino por disminuir el impacto ambiental y encontrar soluciones sostenibles, se han tratado de llevar estas preocupaciones a las grandes esferas políticas, para que, desde allí, se puedan crear acciones y transformaciones efectivas. Sin embargo, este ha sido un camino complejo, especialmente porque para muchos no es tan fácil hacer coincidir el ‘éxito’ económico con el cuidado ambiental.

Este ha sido uno de tantos temas que le han apasionado y por los que ha abogado Juan Camilo Cárdenas, profesor de la facultad de Economía de la Universidad de los Andes, director del Centro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para América Latina y el Caribe.

Durante varios años, Cárdenas se ha dedicado al análisis y diseño de instituciones que promuevan la cooperación y que trabajen en pro de la equidad, democracia y especialmente de la sostenibilidad en toda América Latina.

¿Por qué es tan complicado hablar sobre el cambio climático?

Desde hace más de 3 siglos, el desarrollo económico global ha mantenido un crecimiento incontrolable. Como lo explicó Cárdenas, en una reciente conversación en el programa AIRE LIBRE, la revolución industrial en Inglaterra fue el hito que llevó a que presentara un incremento sin igual de los ingresos de las personas, en su calidad, en su esperanza de vida, e, incluso, hasta en la reducción de la pobreza extrema.

Sin embargo, también trajo impactos negativos, como el enorme incremento en la cantidad de CO₂ que se emite a la atmósfera o el cambio en la variabilidad del clima con relación a fenómenos climáticos, siendo ahora más extremos.

Todo este panorama climático, el cual se siente fuertemente en todo el mundo, se suma también con un generalizado malestar social que, según explica Cárdenas, se origina en sistemas económicos capitalistas que, además de agudizar las desigualdades en el mundo, han sido pésimamente torpes en atender las decisiones y cambios que demanda la crisis climática en el mundo.

“Esta situación no quiere decir necesariamente que, por la crisis climática, tengamos que botar a la basura todo el sistema; pero sí podría indicar que tenemos que redireccionar el barco en el que estamos todos”, explicó Cárdenas.

El cambio de Colombia hacia la sostenibilidad

Cárdenas ha hecho un trabajo inigualable en la concientización y en la introducción de este tema tanto en las grandes discusiones políticas como en el resto de los sectores de la agenda nacional. Para ello, se ha dedicado a trabajar desde la academia, motivando a que sus estudiantes cuestionen el sistema económico actual y así encuentren caminos claros que permitan convertirlo en un sistema sostenible.

Sobre esa transición que se espera lograr en el país durante los próximos años, Cárdenas asegura que: “Colombia podría estar en un modelo más o menos sostenible, pero todavía hay muchas empresas que se resisten a ser parte de la transición económica, para convertirnos en un territorio más sostenible”.

Entre los más grandes retos, está el sistema económico alrededor del sector agrario. Sin embargo, sobre ello, el profesor asegura que, “no podemos resolver los problemas de lo agrario sin pensar en la biodiversidad, ni podemos pensar en los problemas de los retos de conservación del capital natural, sin pensar entre lo rural y lo agrario”.

Estos retos, nacionales y globales, deben ser puestos sobre la mesa de conversación, especialmente porque el país es uno de los más vulnerables ante los cambios climáticos que vive el mundo. “A pesar de que somos muy poco responsables de las causas del cambio climático, somos de los más vulnerables, y especialmente vulnerables en agua y en la producción de agua”, aseguró.

Todas estas reflexiones han sido claves en la movilización de personas que trabajen en pro de abrir debates que permitan la construcción de rutas de acción efectivas y útiles para una Colombia más sostenible.