En España rescataron 12 mujeres del Eje Cafetero que estaban siendo explotadas sexualmente
Habían sido captadas por una red criminal familiar de colombianos que operaba en el país ibérico.
En total fueron 18 las personas capturadas por la Guardia Civil de España, en colaboración con la Dirección de Investigación Criminal e Interpol de Colombia, esto tras la ejecución de seis diligencias de registro y allanamiento en las localidades de Almendralejo y Arrecife, de los cuales seis ya han ingresado a prisión por los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, prostitución coactiva, tráfico de estupefacientes, distribución de medicamentos, delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, delitos contra el derecho de los trabajadores y pertenencia a organización criminal.
Confirmaron las autoridades que, durante estos operativos, lograron rescatar a 12 víctimas de origen colombiano, las cuales fueron captadas en varios municipios del Eje Cafetero, para ser explotadas sexualmente en el país ibérico. Esta organización criminal les imponía una deuda económica que podía ascender a los 3.400 euros, aproximadamente 16 millones de pesos colombianos, y les retenían su documentación personal hasta que esta fuera saldada.
El coronel Edwin Masleider Urrego Pedraza, director de la Dijin, se refirió a este operativo internacional.
Coronel Edwin Masleider Urrego Pedraza, director de la Dijin
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Se pudo conocer que esta investigación inició después de que una de las víctimas lograra alertar a las autoridades españolas de la existencia de una organización criminal de índole familiar, en su mayoría colombianos, asentada en la provincia de Badajoz y en la isla de Lanzarote, que se dedicaba a captar mujeres en Colombia para ser enviadas y explotadas en España.
El modus operandi de esta red consistía en captar a mujeres en estado de pobreza, necesidad y especial vulnerabilidad, con carencia de trabajo e ingresos, ofreciéndoles una vida mejor en España para cubrir sus necesidades personales y familiares; la organización se hacía cargo de todos los gastos relacionados con su traslado, el trámite del pasaporte, compra de los billetes, suministro de cierta cantidad de dinero en concepto de viático, así como de todos los trámites necesarios para el cruce de fronteras.
Las autoridades obtuvieron declaraciones de víctimas, que manifestaron que tenían la obligación de estar disponibles durante las 24 horas del día, una o dos horas máximas libres, siendo sometidas a duras penalizaciones económicas. Además, eran obligadas a pedir a los clientes que las invitaran a consumir sustancias estupefacientes, estando permanentemente vigiladas por cámaras de seguridad.