El mejor lugar para guardar los tomates: ni en la nevera ni en el frutero, ¿por qué?

El tomate desempeña un papel fundamental en la gastronomía mundial. Se puede acompañar con ensaladas o usar para guisos, este fruto aporta color, frescura y un sabor agridulce que satisface a la mayoría de personas. Para mantener su frescura y evitar que se deterioren rápidamente, es crucial conocer las técnicas adecuadas de almacenamiento.

Muchos optan por dejarlos en el frutero para tenerlos al alcance o bien guardados directamente en la nevera; sin embargo, ninguna de estas opciones resulta ser la más viable. Con el objetivo de conservar los tomates en óptimas condiciones y evitar que se estropeen con rapidez, lo recomendable es guardarlos prudentemente a temperatura ambiente, en un sitio oscuro con buena circulación del aire.

¿Por qué no dejar los tomates en la nevera?

Es preferible no guardarlos en la nevera, ya que el frío puede cambiarles tanto el sabor como la textura. Si se tiene sembrados tomates verdes, es mejor dejar madurar los tomates en la mesada, ya que una vez listos, se comerán en un par de días.

Trucos para conservar los tomates

Acá le contamos algunos consejos importantes para conservarlos:

• Temperatura idónea: los tomates son frutas climatéricas, lo que significa que continúan madurando después de ser recolectados, por lo que es preferible dejarlos a temperatura ambiente.
• No almacenar en un lugar húmedo: la humedad perjudica a los tomates, así que hay que guardar los tomates en un lugar seco y ventilado.
• No lavarlos antes de tiempo: hay que lavarlos justo antes de usarlos porque el agua acelera el deterioro.
• Separar los tomates maduros de los verdes: los tomates verdes producen etileno, un gas que acelera la maduración de los demás tomates, así que se recomienda mantener separados tomates de diferentes pancartas.
• Almacenarlos boca abajo: colocar los tomates con el tallo hacia abajo evita que se acumule humedad en esa zona de la fruta que podría provocar hongos.
• Elegir tomates maduros de forma firme: a la hora de comprarlos, hay que elegir los tomates que presentan una firmeza pronunciada y un color uniforme, evitando los que están blanditos, muestran manchas u ofrecen partes verdes.

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Beneficios de comer tomate

Incluir tomates frescos en la alimentación genera múltiples beneficios significativos para la salud, tales como:

• Disminuir la posibilidad de padecer un accidente vascular en el cerebro, al tiempo que contribuye a que el cerebro mantenga sus funciones algo más jóvenes.
• Reducir los niveles del colesterol.
• Evitar sufrir enfermedades del corazón y reducir la posibilidad de tener infartos.
• Poseer propiedades diuréticas que ayudan a evacuar líquidos.
• Potenciar el funcionamiento del sistema inmunitario, facilitando la lucha contra las infecciones.
• Ayudar a prevenir ciertos tipos de cáncer, como el del páncreas y el de la próstata.
• Favorecer un tránsito intestinal correcto.
• Defender la piel de las nocivas consecuencias de los rayos ultravioletas.