Colapso del puente de Bongamella en San Pelayo, una historia de presunta negligencia
La obra, que costó $2.600 millones, había sido cuestionada por los residentes debido a su construcción defectuosa y falta de cabeceras para garantizar su estabilidad.
Colapso del puente de Bongamella, en San Pelayo, Córdoba.
Montería
El reciente colapso del puente vehicular de Bongamella, sobre el arroyo El Diluvio, en San Pelayo, Córdoba, ha sacudido a la comunidad local y planteado serias preguntas sobre la gestión de los recursos públicos y la responsabilidad gubernamental. La obra, inaugurada en diciembre de 2023 por el entonces alcalde Harving Espitia y el exgobernador Orlando Benítez, se había promocionado como una solución a los problemas de movilidad en la región.
Sin embargo, apenas 10 meses después, el puente cedió bajo el peso de las fuertes lluvias, dejando a más de 6.000 personas sin acceso seguro a servicios básicos y transporte. Los residentes, que habían denunciado previamente la construcción defectuosa del puente, ahora enfrentan dificultades para acceder a sus hogares, escuelas y centros de salud.
La comunidad ha expresado su frustración y descontento hacia las autoridades locales y departamentales, que parece haber descuidado la seguridad y el bienestar de los ciudadanos. “Nos prometieron una solución a nuestros problemas de movilidad, pero ahora estamos peor que antes. Es inaceptable que una obra tan costosa dure tan poco”, declaró un residente.
Las investigaciones preliminares sugieren que la construcción del puente fue realizada sin cumplir con los estándares mínimos de seguridad y calidad. La falta de cabeceras adecuadas y la utilización de materiales de baja calidad pueden haber contribuido al colapso.
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Los organismos de control han iniciado investigaciones para determinar si hubo actos de corrupción o negligencia en la ejecución del proyecto. La Procuraduría General de la Nación, la Contraloría General de la República y la Fiscalía General de la Nación están trabajando conjuntamente para esclarecer los hechos.
Mientras tanto, los residentes de la zona y áreas aledañas esperan soluciones temporales para su movilidad y una respuesta contundente de las autoridades responsables. La comunidad exige una reconstrucción integral del puente, garantizando la seguridad y la calidad de la obra.
El colapso del puente de Bongamella es un recordatorio urgente de la necesidad de transparencia y rendición de cuentas en la gestión de los recursos públicos. Es hora de que las autoridades tomen medidas concretas para prevenir este tipo de tragedias y garantizar el bienestar de los ciudadanos.
La Gobernación se pronuncia
Frente a la situación del Puente Bongamella, sobre la quebrada El Diluvio, en San Pelayo, la Gobernación de Córdoba informó que, en diálogo con el alcalde William Cavadía Hernández se coordinó una inspección ocular en sitio.
Según el gobierno departamental, la afectación, de acuerdo a lo que se observa en las fotografías tomadas por la comunidad, es concretamente en la rampa de aproximación y no en la estructura del puente. Sin embargo, se pide a la comunidad precaución.
“Es importante tener en cuenta los procesos erosivos que se presentan en esta zona, que podrían estar asociados a la causa de la afectación. Requeriremos al municipio para que solicite al contratista tomar los correctivos para garantizar la estabilidad de la estructura”, puntualizó la Gobernación.
