Los dos infiltrados que pasaban datos sobre el alcalde de Bucaramanga. ¿Quiénes eran?

Bucaramanga

Las autoridades identificaron a 2 de los infiltrados que hacían parte del plan para atentar contra el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez. En primicia, Caracol Radio había informado sobre un esquema de grupos delincuenciales para causar daño al mandatario que ha liderado una ofensiva en contra de las bandas criminales que generan inseguridad en la capital de Santander. El hecho obligó a que la Unidad Nacional de Protección, UNP ajustara el esquema para preservar la vida de Beltrán y su familia.

El alcalde reveló a Caracol Radio algunos de los resultados de las pesquisas efectuadas luego de que se descubriera el plan criminal.

¿Quiénes eran los inflitrados?

De acuerdo con el alcalde las 2 personas que se habían inflitrado para hacer inteligencia sobre sus movimientos eran un supuesto feligrés que acudía de manera regular a los oficios del Movimiento Evangelístico Camino a La Libertad, la iglesia cristiana que orienta el papa del alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán. La otra persona trabaja en la administración local.

La identidad de los dos infiltrados se mantiene en reserva. Tampoco se ha precisado si estos sujetos tienen una orden de captura en su contra o si en el caso del funcionario de la alcaldía fue apartado de sus funciones.

La seguridad del alcalde

El alcalde dice que debieron efectuarse ajustes a su esquema de seguridad, aunque él se ha mantenido activo; por ejemplo, durante este puente festivo acudió a un populoso sector del occidente de Bucaramanga.

Desde un sector de la opinión pública ponen en duda que se haya orquestado un plan criminal para causar daño al mandatario. Quienes no creen en la versión dicen que no hubo una denuncia previa; tampoco creen que detrás estén desmovilizados del EPL dado que pasó mucho tiempo desde que se produjo la desintegración de esa guerrilla.

El plan criminal

En exclusiva, Caracol Radio conoció que las autoridades están tras la pista de un acuerdo con el objetivo de asesinar al alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, entre exmiembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y antiguos integrantes del Ejército Popular de Liberación (EPL). Todo alrededor de la actividad en el narcotráfico que adelantan y los contactos que tienen con delincuencia común dedicada al comercio de estupefacientes.

Una de las hipótesis que se contemplan es que la alianza, además del cese en los enfrentamientos territoriales de ambos grupos, se habría alentado gracias a una retaliación por el golpe que dieron las autoridades, en incautaciones y capturas, a los miembros de la banda Los Camioneros, dedicada a la entrada y comercialización de drogas en Bucaramanga.