En un comunicado inquietante, las disidencias de las FARC, encabezadas por alias “Calarcá”, han declarado al alcalde del municipio de Lejanías, Jefree Martínez, como objetivo militar. El grupo armado, conocido por su intimidación y extorsión a comerciantes y campesinos en el sur del departamento, ha incrementado sus amenazas contra el mandatario local.

El mensaje intimidatorio fue claro y directo: “Si no le mandamos un susto a él, se lo mandamos a la mamá”. Estás amenazas se debieron gracias a las medidas que tomo el alcalde para la protección y seguridad de los comerciantes de la zona.

Además, Martínez se ha esmerado por evitar que cierren sus negocios, bajo la presión de asistir a reuniones forzadas con miembros de la tropa armada, donde son extorsionados y se les instruye para enfrentarse a la fuerza pública.

El alcalde agregó también: “en aras de que la gente evitara acudir a esta situación del señor Calarcá en jurisdicción del municipio de Uribe, con fines extorsivos, decretamos el toque de queda y acordonamos el municipio, gracias al acompañamiento del ejército y la policía nacional y pues al parecer esto disgusto a las disidencias de las FARC”.

Jefree Martínez ha afirmado en varias ocasiones, que se encuentra inquieto, porque el actual negociador de la paz con el gobierno nacional, ”Calarcá″, está detrás de las intimidaciones. A pesar de las amenazas de muerte, el alcalde lucha para mantenerse en el cargo.

¿Qué respuesta ha recibido por parte del estado?

Adicionó el mandatario local que La Unidad Nacional de Protección (UNP) ha enviado un chaleco antibalas y un botón de pánico al alcalde para garantizar su inmunidad. Aunque, él considera que estas medidas son insuficientes para la protección de su familia y de él mismo.

Asimismo, advirtió que solo cuenta con doce policías a su disposición y teme que violenten contra la estación de la Policía: “la información de inteligencia dice que hay amenazas de que empiecen a implementar drones acá en el territorio, tal y como lo están haciendo en otras áreas del país”.

De igual modo, trata de coordinar con el Ejército y la Policía: “Nosotros hacemos parte de la jurisdicción del batallón de infantería número veintinueve. Hay presencia, pero nuestro municipio es muy extenso para tener un dominio total por parte del ejército″. Sumo Martínez.

Las tenciones aumentaron semanas atrás

Estos sustos por parte de las FARC, se intensificaron cuando junto a su colega de San Juan de Arama, estableció esta medida como objetivo para impedir que los comerciantes asistieran a reuniones convocadas por los guerrilleros en un planchón sobre el río Guayabero.

Ellos veían en estas reuniones una oportunidad para forzar una especie de “vacuna” a los comerciantes y ampliar su zona fuerte de control territorial.

Incumplimientos de los acuerdos de paz

Estas disidencias, que se habían reagrupado en la región pese a los acuerdos de paz implementados por mutuo acuerdo en 2016, entre Gobierno Santos y las demás partes involucradas.

¿Qué espera la comunidad?

El alcalde Martínez seguirá enfrentando la situación desafiante y peligrosa, con confianza y determinación para mantenerse en el cargo. De igual manera, la comunidad espera que las autoridades tomen medidas adicionales para garantizar la seguridad del municipio.