La tragedia yibutiana que expone la peor ruta migratoria del mundo
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM), confirmó la muerte de 38 personas dentro de una embarcación hundida en las costas de Yibuti, que pretendían llegar a Yemen por el Golfo de Adén.
Refugees arrive aboard a boat at the port of Djibouti after crossing the Gulf of Aden to flee Yemen on April 14, 2015. Refugees from war-torn Yemen described the terror of intense airstrikes, the horror of the airstrikes that pounded their homes in Yemen, as they arrive in the Horn of Africa, where aid agencies are fearing an influx of people. AFP PHOTO / TONY KARUMBA (Photo credit should read TONY KARUMBA/AFP via Getty Images) / TONY KARUMBA
Yibuti
Continúa la preocupante situación migratoria en África, puesto que la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), confirmó que se presentó un nuevo caso en costas de Yibuti, donde 38 personas murieron al hundirse una embarcación.
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A través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), la OIM sostuvo que “se recuperaron 38 cuerpos, incluidos niños, después de un trágico naufragio en el que al menos otras seis personas están desaparecidas y se presumen muertas”. Agregaron que 22 sobrevivientes están siendo atendidos, gracias al trabajo de las autoridades del país que se encuentra en el Cuerno de África.
Con un poco más de detalles, Ivonne Ndege, quien es la portavoz regional de la OIM en Nairobi, Kenia, sostuvo que “el barco salió de la costa de Yemen alrededor de las 2 de la madrugada de ayer lunes 8 de abril, con unas 66 personas a bordo (...) la embarcación se hundió unas dos horas después”.
Diez años de migrantes muertos y desaparecidos en el Cuerno de África.
Además de la pobreza reinante en el Cuerno de África, desde 2022, la OIM creo un registro que tituló ‘Proyecto Migrantes Desaparecidos en la Ruta Oriental’, que abarca el lapso de 2014 y que a su vez ha contabilizado hasta el momento en ese década, alrededor de 1.000 personas a las que se les ha perdido el rastro.
GODORYA, DJIBOUTI - JANUARY 19: An Ethopian ID document discarded by a migrant as they boarded a trafficker's boat is seen on January 19, 2024 in Godorya, Djibouti. The recent attacks on commercial ships by Yemen's Houthi rebel group, which have prompted a series of air strikes by the United States and its allies in response, have not just imperilled a vital shipping route, but also the popular "Eastern Route" for migrants heading from Ethiopia to Saudi Arabia, via Djibouti and the Bab al-Mandab Strait that connects the Gulf of Aden and Red Sea. The strait is also a heavily trafficked shipping route on the way to the Suez Canal. (Photo by Luke Dray/Getty Images) / Luke Dray
La Organización Internacional para las Migraciones de la ONU (OIM), ha concluido que el mundo aún no contempla ni entiende con lo que ocurre en la ‘Ruta Oriental’, y que podría calificarse como la ruta de personas más concurrida del planeta sin ningún destino fijo.
La crisis humanitaria es tal, que miles de inmigrantes africanos intentar no llegar a Europa sino establecerse en Arabia Saudita, llegando desde Yemen, por cuestiones religiosas y culturales, pero que no tienen éxito en su destino, por lo que en última instancia, es establecerse en Yibuti, Etiopía, Somalia, o retornar a sus países de origen, sea cual sea el caso.
Registros del 2023.
Este caso que podría llamarse el ‘barco de los repatriados’, es uno más de las más de 400 mil travesías que africanos en el oriente del continente, ha intentado buscar un futuro mejor tan sólo en el 2023. Durante el último año 698 personas, entre ellas mujeres y niños, murieron en la ruta oriental, cruzando el golfo de Adén desde Yibuti hasta Yemen con la esperanza de llegar a Arabia Saudí.
Dichas personas han intentado dejar sus hogares buscando oportunidades laborales, escapando también de conflictos políticos, la inseguridad reinante en el continente y también, efectos económicos postpandemia y cambio climático.
¿Qué es la ‘Ruta Oriental’?
La ‘Ruta Oriental’ desde el Cuerno de África hasta Yemen y los estados del Golfo Pérsico se encuentra entre las “más peligrosas” del mundo, según la institución de las Naciones Unidas. En esa travesía, fácilmente pueden enfrentan riesgos que ponen en peligro sus vidas, como hambre, enfermedades y explotación a manos de traficantes de personas.
Dependiendo la parte del mundo en la que cualquier ciudadano se encuentre, este tiende a inclinarse a una apreciación que sus connacionales o personas que coincidan con su cultura, padecen más rigores en cualquier ruta migratoria. Por ejemplo hay latinos que creen que cruzar por el Tapón del Darién o la frontera entre México y Estados Unidos, es una dura travesía, o los europeos creen que la ruta migratoria por el Mediterráneo es la más poblada del mundo.
Migration routes from East and Horn of Africa // Rutas migratorias desde el Este y el Cuerno de África. Cortesía: OIM (2018).
Pero la realidad y según datos recopilados por la Matriz de Seguimiento de Desplazamientos de la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU, ha desmontado los anteriores mitos, y ha establecido que el trayecto más poblado de migrantes es el de africanos hacia Yemen por el Este y el Cuerno de África. Más de 138 mil personas cruzaron en 2020 el Golfo de Adén en dirección a Yemen, comparándolo con los 110 mil que atravesaron el Mediterráneo durante el año.
En los siguientes periodos (2021, 2022 y 2023), esta ruta se mantiene con un promedio de 115 a 118 mil personas, que no tienen per se como último destino Yemen, sino Arabia Saudita, puesto que el 90% de las personas que lograron llegar a Adén, sino al país saudí, más conocido como el Emirato de Diriyah. Y en ese porcentaje, las regiones que más aportan al total de migrantes provienen de las regiones etíopes de Amhara, Tigray y Oromia.
La influencia del actual conflicto en Yemen con la tragedia migratoria africana.
Todo el contexto anterior que puede dibujar que es la ruta migratoria no sólo es la más poblada del mundo, sino la más dura por condiciones humanitarias, puesto que son miles los jóvenes que sufren de abusos a manos de contrabandistas y traficantes que los explotan, según Mohammed Abdiker, director regional de la OIM para el Este y el Cuerno de África.
Y aquí es donde entra el conflicto yemení que inició a finales de marzo del 2015, con la ofensiva político-militar del grupo insurgente hutíe contra la ciudad de Adén, que se ha desbordado en una guerra civil, incluso con participación internacional los últimos años, con la entrada de Arabia Saudita, Egipto, Irán, Israel, Estados Unidos, así como facciones tribales, grupos armados, partidos políticos y organizaciones yihadistas como Al Qaeda y el Estado Islámico (Daesh).
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Los últimos cinco años de conflicto, al contrario de mermar el flujo migratorio por el conocimiento regional de la guerra civil, lo ha incrementado, por que en cifras y entrevistas a personas migrantes, dan muestra que no existe ningún tipo de intimidación por las estrictas políticas de inmigración en el Golfo para los indocumentados.
Las personas que llegan a Yemen, en un alto porcentaje pueden ser blanco de retenciones que duran un mes, por parte de contrabandistas y traficantes (incluso de cualquier nacionalidad africana), quienes tienen acuerdos con barcos provenientes de la ciudad de Obock en Yibuti y la de Bosaso en Somalia. Se han conocido casos que familiares de migrantes, envían 900 dólares a cambio de su liberación.
Tan sólo entre enero y el 30 de abril de 2022, los guardias fronterizos saudíes cometieron homicidios ilegítimos masivos de migrantes etíopes en la frontera yemení que causaron la muerte de aproximadamente 430 migrantes y lesiones a otros 650 en bombardeos y disparos transfronterizos.
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Hoy, en pleno 2024, el flujo migratorio no cesa, inclusive en las constantes amenazas de los ejércitos estadounidense y británico, en repetir los bombardeos y ataques contra los hutíes en Yemen, como los efectuados en enero, y que se dieron como respuesta a los ataques de ese grupo insurgente a embarcaciones del comercio internacional en el Mar Rojo desde octubre en 2023.
Los bombardeos se han dado también en Saná, la actual capital yemení, así como en las ciudades de Al Hudayda y Dhamar; con la intención de afectar centros logísticos, sistemas de defensa aérea y lugares donde se almacén armamento insurgente hutíe.
Una estrategia para frenar el flujo migratorio serían acuerdos laborales entre países de la zona del Golfo de Adén.
Recientemente la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), aplaudió el acuerdo comercial y laboral del año anterior, entre los gobiernos de Etiopía y Arabia Saudita, exponiéndolo como el medio más proteccionista hasta el momento para que los migrantes, tengan garantías legales para su travesía y llegada. El acuerdo establece un sistema de contratación de más de 100 mil trabajadores domésticos.
