Yimmy Gómez tras su primera titularidad: tenía que estar a la altura de Chunga y Marmolejo
El guardameta de 24 años fue titular en el triunfo clave del Medellín ante Millonarios.
En el triunfo 2-1 de Independiente Medellín ante Millonarios en la cuarta jornada de cuadrangulares, Yimmy Gómez tuvo su primera parición como arquero titular del club antioqueño. En conversación con El Vbar de Caracol Radio, el guardameta compartió sus impresiones del partido, así como su proceso de preparación previa al importante duelo que enfrentó.
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El futbolista de 24 años, nacido en Guachené, Cauca, inició su camino en el fútbol profesional en Fortaleza y Barranquilla. Por formar parte del Club Deportivo Pedro Sellares y, gracias al convenio con el DIM, surgió la opción de compra que resultó en la oportunidad de subir a la Primera División.
“Sabía que tenía que estar a la altura de José Chunga y Andrés Marmolejo, obviamente no comparándome con ellos porque me falta mucho por recorrer, pero sí aprenderles mucho”, comentó el portero tras agradecer a la B por ayudarlo a forjar el carácter y la madurez que le ha permitido conseguir su primera titularidad desde su fichaje en junio de 2023.
La victoria, que les permitió tomar la delantera del grupo B, fue, a su vez, el escenario ideal para el estreno de Gómez en el once inicial. “Fue virtud tanto de nosotros, como de Millonarios, porque nos sometió, pero lo supimos controlar y eso es lo importante”, concluyó resaltando la materialización del trabajo que venían realizando en los entrenamientos.
Triunfo ante Millonarios
Primera titularidad: Éramos conscientes del partido que nos jugábamos ayer, el grupo estaba muy tranquilo porque sabía que iba a estar con nuestra hinchada, un partido lindo de jugar. Gracias a Dios conseguimos los dos goles muy rápido, en los cuales se vio el fruto del trabajo que se hizo, ocupar los espacios y los cajones en la zona de finalización.
Balance del partido: Recalcar el trabajo del equipo, no era fácil defender ese sistema que el profe planteó en el segundo tiempo, en el que buscaban tirarnos muchos centros. Fue virtud tanto de nosotros, como de Millonarios, porque nos sometió, pero lo supimos controlar y eso es lo importante.
Preparación para estar en el arco: Los dos me hablaban (Chunga y Marmolejo), me decían que estuviera muy tranquilo porque igualmente las capacidades las tenía, que me venía entrenando muy bien, que lo más importante era estar tranquilo, siempre muy atento en cada una de las pelotas, desconfiar de mis compañeros pero a la vez confiar en ellos. Me dijeron cosas muy importantes, que cada balón fuera con fuerza y pienso que se dio lo que practicamos durante toda la semana.
Inicios en la Segunda División
Paso por Barranquilla: En Barranquilla estoy agradecido con la familia Char, con todas las personas que me brindaron la oportunidad de estar allá en ese maravilloso club. En lo futbolístico fue un año difícil para cada uno de nosotros, por lo que vivimos, porque no clasificamos, pero todo eso es relativo. Respecto al juego, en el sistema que el profe planteaba, me tocaba jugar mucho con los pies, tomar buenas decisiones, saltar muchas líneas de pase y seguramente arriesgar mucho, cosa que acá en Medellín es más práctico. Acá hay que hacer el juego más simple, porque tenemos los jugadores que tienen esa capacidad de meter un pase con más calidad.
Lejos de su región: Antes de estar en Medellín, hacía parte de América, pero en Sellares se dio la oportunidad de venir a Medellín en convenio y a medida que pasó el tiempo se dio la opción de compra.
Lleada a la primera división: En el Barranquilla hay una cultura muy diferente, entonces allá terminan de forjar mi carácter. Siento que maduré y crecí mucho allá y ya venía con esa mentalidad que en cualquier momento me iba a tocar estar en un equipo de este tamaño y jerarquía como lo es Medellín y tenía que prepararme. La calidad de jugadores que hay en el torneo de la A, marcan la diferencia, pero uno tiene que estar preparado para eso, con mucha humildad al hacer las cosas y trabajar el doble. Sabía que tenía que estar a la altura de José Chunga y Andrés Marmolejo, obviamente no comparándome con ellos porque me falta mucho por recorrer pero sí aprenderles mucho.