“No hay ni un solo lugar seguro en la Franja de Gaza”: Médicos Sin Fronteras

Hoy se cumplen 24 días de guerra entre el Estado de Israel y las milicias de Hamás, tras el ataque sorpresivo de este grupo terrorista a suelo israelí, que dejó más de 1.400 muertos, al menos 5.400 heridos y 240 secuestrados en el enclave palestino.

Desde entonces, el Ejército israelí ha intensificado sus ataques por aire y tierra en la Franja de Gaza, controlada por Hamás. Este martes la cifra de víctimas en el enclave se elevó a 8.525 muertos y 21.543 heridos, según información del Ministerio de Sanidad.

Además, al menos 57 “instituciones sanitarias” han sido blanco de ataques desde el pasado 7 de octubre por fuerzas israelíes. Hasta el momento, 15 hospitales están fuera de servicio por los bombardeos y la falta de combustible, y 32 centros de atención primaria han dejado de funcionar.

Israel afirmó que Hamás usa las instalaciones médicas en Gaza con fines militares y que esto justificaría atacarlas. Sin embargo, la ONU indicó que los hospitales deben estar totalmente protegidos de ataques, independientemente de los usos que un bando en conflicto haga de ellos.

En conversación con 10AM Hoy por Hoy, David Cantero, líder de la misión de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Jerusalén, señaló que en los últimos días hubo bombardeos en proximidades de tres hospitales en Gaza, entre ellos el de Shifa, el más importante de la Franja:

“La situación hoy en día en la Franja de Gaza es catastrófica, estamos ante una crisis humanitaria que no tiene precedentes en la región. Estamos siendo testigos directos de una matanza indiscriminada de población civil, mayoritariamente mujeres y niños, de los 8.500 muertos, el 80% corresponde a esta población”.

Gaza está sufriendo un castigo colectivo por parte de Israel

De acuerdo con Cantero, los habitantes de Gaza están sufriendo un castigo colectivo por parte de Israel que está prohibido por Derecho Internacional humanitario (DIH): “Han sido expuestos a un bloqueo total y hemos visto que durante muchas semanas no ha entrado nada de ayuda humanitaria, ni agua, comida, medicamentos”.

Frente al colapso sanitario, el líder de MSF indicó que quedan 13 hospitales en funcionamiento, pero un tercio de ellos han sido afectados por la falta de combustible. En estos centros se están racionando las máquinas y los medicamentos debido a la escasez de electricidad:

“Los colegas palestinos dicen que se han quedado sin analgésicos y están con una cantidad muy baja. Un colega nos explicó cómo le había tocado llevar a cabo una amputación del pie a un niño en el suelo con sedación parcial y delante de su hermana y madre en un pasillo del hospital”.

Según comentó, 300 médicos palestinos que hacen parte de MSF están trabajando en la frontera con Gaza, sin embargo, algunos fueron obligados a desplazarse hacia el sur:

“Todo el personal sanitario que está en Gaza se juega la vida cada día para poder realizar su trabajo, puesto que los bombardeos contenían en el norte e incluso en el sur, donde se estaba desplazando porque así lo habían pedido. Desde Médicos Sin Fronteras queremos denunciar que no hay ni un lugar seguro en la Franja de Gaza”.

Por último, manifestó que desde MSF solicitan al Gobierno de Israel que se permita el paso sin restricciones de la ayuda humanitaria.