Internacional

Cronología: Así fue el cruel asesinato a Edwin Arrieta a manos del chef Daniel Sancho

Desde el momento en que pisó Tailandia, hasta su primera visita en prisión, así han sido los pasos que ha recorrido el confeso asesino del cirujano colombiano

Edwin Arrieta Arteaga y Daniel Sancho. Foto: Colprensa y EFE.

Edwin Arrieta Arteaga y Daniel Sancho. Foto: Colprensa y EFE.

El mundo entero sigue conmocionado por el cruel asesinato del reconocido cirujano colombiano Edwin Arrieta, a manos del joven español de 29 años, Daniel Sancho, quien además intentó ocultar sus actos, desmembrando el cuerpo del cirujano y posteriormente tirando los restos en una exclusiva zona de Tailandia.

Los escabrosos detalles que se siguen conociendo con el pasar de los días, mantienen puesta la atención en el caso. Además, el trato que las autoridades le han brindado al confeso asesino, ha sido motivo de preocupación e indignación para los colombianos, quienes en este momento piden justicia.

Cronología: los pasos que recorrió Daniel Sancho

El lunes 31 de julio, cuando el hijo del actor Rodolfo Sancho, aún era una persona poco reconocida, llegó proveniente de España a un hotel en la pequeña isla de Koh Phangan, Tailandia, para celebrar la fiesta de la luna llena, que atrae cada año a muchos turistas y que es conocida por sus excesos en el consumo de alcohol y drogas.

Al día siguiente, el 1 de agosto, según los agentes tailandeses que investigan el caso, el chef realizó algunas compras en una tienda de la zona. Días después se conoció que las compras fueron desde guantes de goma a bolsas de basura, pasando por varios productos de limpieza y un cuchillo. Tras adquirir esta lista de la compra, se traslada al bungalow del Hat Salad que tenía reservado y guarda ahí los ‘utensilios’.

Ese mismo día, Sancho intentó alquilar un kayak, ofreciendo hasta mil dólares por él, pero no lo consiguió.

Luego, el 2 de agosto, el español y el colombiano comieron en un restaurante de la zona y recorrieron parte de la isla en la moto alquilada por Sancho. En los vídeos a los que ha tenido acceso la policía, se puede ver al cirujano plástico con la misma ropa que las autoridades lo encontrarían en un vertedero el viernes. La pareja acude al hotel, juntos. Es ahí donde se le pierde la pista a Edwin.

También ese miércoles, 2 de agosto, según su testimonio, se dedica a meter las 14 partes del cuerpo de Edwin en bolsas que tardó, en desmembrar tres horas.

El 3 de agosto, Daniel Sancho, ya sin Arrieta, dejó el hotel para asistir por la noche a una fiesta en la isla junto a una mujer que conoció en los días previos. El realizó un nuevo viaje abordo del kayak y tiró unas bolsa al mar (con los restos de la víctima). Tres horas después, más o menos sobre las nueve de la mañana, hace el ‘checkout’ y deja el hotel donde se hospedaba y donde acabó con la vida de Edwin.

Los trabajadores de limpieza, casi al mismo tiempo, comienzan a encontrar las bolsas de basura con los restos humanos. Posteriormente, la noticia comienza a difundirse por los medios locales y, poco después, era el propio asesino quien denunciaba ante una comisaría la desaparición de Edwin, asegurando, según el informe policial, que no sabía nada de él desde el miércoles.

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Ya el viernes, 4 de agosto, continúa el descubrimiento de los restos humanos del médico y la policía vuelve en busca de Daniel Sancho, que sigue negando saber nada de él y que tenga algo que ver con el suceso.

Se descubren más bolsas de plástico en el vertedero de Koh Phangan con partes de la pierna derecha de Edwin, un pantalón corto, un calzoncillo y una camiseta. La policía también encuentra un ticket de compra que los conduce al supermercado donde el hijo de Rodolfo Sancho había comprado el cuchillo y el resto de objetos.

Así entonces, comienza un interrogatorio que acaba con el chef español confesando el asesinato de Edwin Arrieta.

El sábado 5 de agosto, las pruebas de ADN realizadas sobre los restos confirman que pertenecen al cirujano colombiano. En el registro del hotel, la policía tailandesa encuentra sangre, pelo, grasa y otros restos de Edwin en los desagües del Bungalow.

Durante el interrogatorio, Sanchi admite, además, haber mantenido un encuentro sexual con la víctima, previo desembarco de ambos en Tailandia. Añade que, desde aquel momento, se había sentido coaccionado. “Era un rehén de Edwin. Me obligó a hacer cosas que nunca hubiera hecho”, relató.

El domingo 6 de agosto, el joven de 29 años colabora con la policía local para esclarecer los hechos. Ese mismo día, aparecen más restos del colombiano en una playa de la isla.

Su padre, Rodolfo Sancho, emite un comunicado en el que pide “máximo respeto”, en estos “momentos delicados y de máxima confusión”.

Entre tanto, Daniel, le dijo a la prensa que: “él (Edwin) estaba obsesionado conmigo. Me engañó, me hizo creer que lo que quería era hacer negocios conmigo, meter dinero en la empresa de la que soy socio. Que hiciéramos cosas juntos... Pero era todo mentira. Lo único que quería era a mí, que fuera su novio”.

El lunes, 7 de agosto, el asesino es trasladado desde Koh Phanghan a Koh Samui para declarar ante el juez. Lo hace escoltado y escondiendo las esposas bajo una toalla. El magistrado lo envía a prisión provisional a la espera de juicio.

Según el Código Penal tailandés, el homicidio puede castigarse con un periodo en prisión de 15 a 20 años, aunque la cadena perpetua también se contempla en estos casos. En el país, sigue existiendo la pena de muerte, pero solamente se utiliza en los casos más extremos.

Este martes, 8 de agosto, Daniel Sancho recibió la primera visita de su abogado en la cárcel de Koh Samui.

Ahora, la policía tailandesa continúa con la investigación y faltan todavía por localizar ocho de las 14 partes del cuerpo del cirujano colombiano que Daniel Sancho tiró por la isla.

Surgen dudas en medio del proceso

Para muchas personas que están siguiendo de cerca este terrible caso, es extraño ver el trato que se está dando al asesino.

Por ejemplo, horas antes de que Sancho ingresara en prisión tras declararse culpable del asesinato, una reportera española habló con él vía WhatsApp. El joven, según medios internacionales, ante la pregunta de si necesitaba algo, dijo: “Volver a España, moved cielo y tierra para eso. Seguid con cobertura mediática”.

Además, afirmó que la Policía lo estaba tratando muy bien. “Para que te hagas una idea de lo bien que me tratan, estoy cenando con ellos en el mejor hotel de la isla, es un Anantara”, dijo, refiriéndose a uno de los hoteles más lujosos de la isla.

La reportera le preguntó a Sancho, “¿No estás detenido?”, a lo que él responde, “Sí, sí, claro, estoy rodeado, pero me han traído a cenar aquí porque han cerrado el caso y mañana estoy con 20 personas en una celda”. Estas declaraciones que han causado polémica por las condiciones de su arresto.

La relación de Daniel Sancho con Edwin Arrieta

Daniel Sancho habló con Edwin Arrieta por primera vez hace aproximadamente un año a través de redes sociales. Poco después de intercambiarse fotografías de carácter íntimo, se conocieron en persona y habrían mantenido relaciones sexuales.

En diciembre de 2022, Edwin habría invertido al menos 10 mil euros en el restaurante de Daniel. Sin embargo, en febrero de este año, el español, supuestamente y según su versión, habría decidido terminar la relación y trató de distanciarse de Arrieta.

Ese fue el momento en el que supuestamente el cirujano empezó a chantajearlo y lo amenazó con difundir imágenes privadas de él.

Sin embargo, Sancho le pidió a su socio que fuera con él a Koh Phangan para acudir a la famosa fiesta Full Moon y deciden encontrarse en la isla.

En conversación con Caracol Radio, Miguel González Sánchez, abogado de la familia del cirujano, aseguró que el vínculo que existía entre el español y el médico colombiano, es un tema que pasa a segundo plano: “Hoy en día esas relaciones son lo más normal y jamás justificarían ningún tipo de comportamiento macabro como el que cometió este señor”.

Y agregó, “lo que quieren hacer ver ciertos medios internacionales, porque algunos sí han mostrado solidaridad, es que Edwin se buscó su propia muerte por todo este tipo de situaciones, cuando la realidad es que no, vemos un homicidio con toda la sevicia y violencia, eso es lo relevante y sobre eso debemos enfocarnos”.

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