¡Cuidado! Estos son los alimentos que nunca debería darle a su gato
Conozca cuáles son los alimentos peligrosos para los felinos, ya que les provocan diarrea, intoxicaciones y, en casos extremos, incluso la muerte
Desde tiempos inmemoriales, los gatos han sido animales fascinantes que han cautivado la atención y el cariño de los seres humanos. Su comportamiento enigmático y su mirada penetrante han generado un sinfín de preguntas y teorías. Los gatos suelen tener diversas conductas que los identifican y que además hacen parte de su personalidad.
Estos animales, sin duda alguna, se han convertido en parte fundamental de nuestras vidas y hay quienes incluso los consideran parte de su familia. Por esta razón es importante cuidarlos y protegerlos, siempre manteniendo la responsabilidad en los aspectos de su salud.
Los gatos no son animales omnívoros sino carnívoros. De ahí que haya ciertos alimentos a los que no sólo no están acostumbrados, sino que no pueden procesar de forma adecuada. Algo a lo que hay que sumar las características de su hígado, el cual resulta menos efectivo a la hora de eliminar ciertas toxinas.
Alimentos que no pueden comer los gatos
Cebolla y puerros
La cebolla y los puerros son alimentos tóxicos para su gato, ya que contienen tiosulfato, un componente que provoca en el gato la destrucción de sus glóbulos rojos, lo que también se conoce como anemia hemolítica. Otra parte de esta verdura que le resulta tóxica son los brotes verdes (similares a tallos) que crecen en ella.
Frutas como naranjas, pomelos, aguacates o limones
Estos alimentos pueden afectar el riñón del gato si se consumen en grandes cantidades, aunque también pueden causar malestar físico y diarrea en cantidades pequeñas.
Los cítricos como limones y naranjas también causan diarreas y malestar estomacal. En el caso de los limones su aceite esencial resulta especialmente peligrosos. Por su parte los aguacates tienen Persina, una sustancia fungicida que resulta tóxica para los felinos.
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Uvas y pasas
Las uvas y pasas también resultan dañinas. La Sociedad Estadounidense para la Prevención de la Crueldad contra los Animales aconseja no alimentar a los gatos con este alimento. Si las toman, existe la posibilidad de insuficiencia renal aguda. Probablemente, según estudios norteamericanos, por una sustancia tóxica para el gato contenida en la pulpa de la uva.
Chocolate, café o té
Al igual que ocurre con los perros los gatos no pueden tomar teobromina, una sustancia presente en alimentos como el chocolate, el café o el té. En el caso de hacerlo pueden sufrir deshidratación, vómitos, diarrea o úlceras. Además, puede llegar a afectar al sistema nervioso causando convulsiones e incluso la muerte.
Huevos crudos, carne cruda y huesos
Al igual que los humanos, el consumo de huevos crudos o carne cruda puede conducir a la intoxicación por salmonella o E. coli en los gatos.
Los síntomas de la enfermedad varían, pero pueden incluir vómito, diarrea y letargo. La salmonella y la E. coli también pueden transmitirse a los humanos, así que debe lavarse bien las manos después de cocinar y mantener a su gato alejado de estos alimentos crudos. Los huevos crudos también contienen una enzima que puede causar problemas en la piel y el pelaje. Evite que tu gato coma también huesos crudos, ya que podría ahogarse con ellos, dañar su tracto digestivo o sus dientes.
Comida para perros
Esto se debe a que la comida canina carece de nutrientes que necesitan los felinos como la taurina o el ácido arquidónico. Algo que, consumido de forma excesiva, puede provocar un déficit de los mismos que genera serios problemas de salud al animal.
Alimentos con azúcar y sal
El exceso de sal de ciertos embutidos o platos puede causar problemas renales e hipertensión. Además, la grasa de estas comidas puede provocar pancreatitis. En el caso de los embutidos como el jamón york o pavo no habría problema, aunque tampoco es bueno abusar, ya que los comerciales suelen contener azúcares.
En cuanto los dulces y el azúcar, las complicaciones habituales suelen ser la insuficiencia hepática o el exceso de insulina que provoca el xilitol. Los dulces y el azúcar también pueden causar vómitos, pérdida de coordinación y letargo.
Leche y productos lácteos
Aunque a su gato le guste beber leche, no es necesariamente bueno para él. Los gatos tienen problemas para digerir la lactosa de la leche, lo que puede causar malestares estomacales o diarrea.
La mayoría de los gatos sólo están expuestos a la lactosa de la leche de su madre cuando son cachorros. Debido a que los gatitos sólo beben de la leche de su madre durante unas pocas semanas, sus sistemas digestivos a menudo no están equipados para manejar una reintroducción a la lactosa.
¿Cómo evitar que los gatos coman alimentos peligrosos?
La vida y el bienestar de su gato dependen del tipo de alimento que come. Mantenga los alimentos venenosos y peligrosos fuera de su alcance y asegúrese de que consuma un alimento balanceado.
A continuación algunos consejos sencillos para evitar que su gato coma alimentos peligrosos y tóxicos:
- Almacene los alimentos fuera del alcance de su gato. Para un gatito curioso, puede ser necesario instalar cerraduras a prueba de gatos en los armarios.
- No permita que su gato salte sobre el mostrador mientras está cocinando o comiendo.
- No le dé de comer los restos de la mesa.