¿Sabe cuánto dinero podría ingresar a Risaralda producto de la cosecha cafetera?
Se espera una cosecha de tres millones de arrobas, producto de las cerca de 43.000 hectáreas cultivadas en el departamento.
Imagen de archivo - Comité de Cafeteros de Risaralda.
Pereira
Con casi 43.000 hectáreas sembradas y alrededor de 20.000 familias caficultoras, Risaralda sigue siendo uno de los departamentos más productores de café en Colombia, superando las dificultades que han afectado las cosechas, el precio y los insumo, sin embargo, este gremio es uno de los más resilientes, y acciones como la renovación de cultivos y la variedad, principalmente de cafés especiales, mantienen a la región con expectativas de recuperación en la principal cosecha que se presenta en el segundo semestre del año.
Jorge Humberto Echeverri, director ejecutivo del Comité de Cafeteros de Risaralda, resalta que en la región se producen alrededor de 24 sacos por hectárea de café de alta calidad, presentando una gran variedad de perfiles y sabores que se ajustan al actual mercado local y mundial.
“En estos dos últimos años tuvimos unos precios favorables por la escases de inventarios, pero también tuvimos un precio importante en los fertilizantes y la inflación tampoco fue ajena a los costos de producción; hoy tenemos un panorama un poco distinto, vienen bajando los precios de los fertilizantes, pero igualmente, el precio del café en la bolsa de Nueva York viene bajando, eso se debe a varias razones, uno es por la producción alta de se vislumbra en Brasil, un poquito a la disminución de consumo interno mundial, pero seguimos haciendo las labores culturales del café porque en caficultura hay que trabajar en mediano y largo plazo, no podemos pensar que los precios siempre van a ser los mejores, sino que debe haber una combinación y siempre estar preparados para precios buenos, pero para precios bajos con mayor razón hay que hacer un esfuerzo en tener los cafetales renovados, en tener cafetales jóvenes”, explicó el líder gremial.
La renovación de cafetales es una de las estrategias de producción que más puede fortalecer la cosecha para este período, ya que las tierras llevan años siendo cultivadas, y los cafetales jóvenes permiten una producción más alta y si se da una baja de precio, la afectación podría ser menor.
“Tenemos amenaza de un fenómeno fuerte del niño a partir del mes de julio en adelante, y nos venimos preparando climáticamente en varias cosas; primero, los caficultores en el departamento en zonas más bajas tienen cultivos agroforestales, es decir, combinado con forestales para que el efecto climático no de muy duro, sin embargo, en el tema de la cosecha las recomendaciones en el servicio de extensión es hacer los repases en el café, el famoso ReRe, estar recogiendo los cafés sobremaduros evitando que se propague la broca; hoy tenemos unos indicadores de broca bajitos, del 1.5, ojalá conservemos eso, esperemos a ver cómo se viene el fenómeno de El Niño del que se habla en las estaciones climáticas y ojalá no vaya a haber mucha afectación. Por ahora tenemos un clima propicio para caficultura”, destacó Echeverri.
Se espera entonces para la cosecha sacar tres millones de arrobas, es decir, 450 mil sacos de café pergamino seco de 70 kilogramos, lo que tendría un valor de alrededor de 700 mil millones de pesos que se irrigarían por la economía del departamento.
En cuanto a las renovaciones, ha señalado el dirigente gremial que se estima renovar 5.700 hectáreas entre áreas nuevas y ya intervenidas, meta a la que se espera llegar para final de año.
