¿Por qué está lloviendo tanto y tan duro en Bogotá? Experta responde

En la tarde de este jueves 25 de mayo, el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger) informó que se mantienen las precipitaciones en 10 de las 20 localidades de Bogotá, según datos recogidos por el Sistema de Alerta Bogotá (SAB).

Los sectores aledaños a los cerros Orientales, el centro y el oriente de la capital han registrado lluvias desde las horas de la mañana, lo que ha generado algunos empozamientos en varios de los principales corredores viales.

Así mismo, esta semana, después de que en la ciudad se vivieran días extremadamente calurosos, se han presentado jornadas pasadas por agua, generando los tradicionales problemas con las precipitaciones.

Las fuertes lluvias han afectado a las localidades de:

• Bosa
• Kennedy
• Barrios Unidos
• Teusaquillo
• Chapinero
• Puente Aranda
• Tunjuelito
• Santa Fe
• Ciudad Bolívar
• Usme
• Suba
• Fontibon
• Engativá

Desde el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) explicaron que estas fuertes lluvias en la capital corresponden a un fenómeno que trajo más humedad al territorio colombiano.

La mayor Diana Carolina Rueda, jefe de la Oficina de Alertas y Pronósticos del Ideam, explicó que la capital “se encuentra transitando por su primera temporada de lluvias, que va hasta la segunda semana del mes de junio de acuerdo al modo aislamiento numérico. Lo vemos es que Bogotá ha tenido una intensificación en las lluvias en la última semana y esperamos que ese sistema permanezca hasta el día viernes”.

La experta aseguró que lloverá con mayor intensidad en horas de la tarde y en las primeras horas de la noche y que “en algunas localidades es posible que se presenten precipitaciones de forma persistente hasta la madrugada”.

¿Hasta cuándo van las lluvias?

A partir del día sábado irán disminuyendo paulatinamente las lluvias hasta que la próxima semana, es decir, el día sábado 3 de junio se concluya con una semana de tiempo seco.

La mayor explicó que se esperan pocas precipitaciones distribuidas de forma aleatoria en las diferentes localidades de la ciudad.

“Lo anterior es porque la condición climática sinóptica cambia pero el mensaje más importante es que la condición de lluvias va a disminuir para la próxima semana en la ciudad capital”, dijo la experta, quien además explicó que la atmósfera tiene unos tiempos de adaptación y de transición entre un fenómeno y otro.

A nivel nacional, estamos finalizando la temporada de lluvias que en la región Andina, Pacífica y piedemonte Llanero y Amazónico va hasta la segunda semana del mes de junio.

Según detalló el Ideam, varios municipios tienen alertas por desbordamientos de ríos, quebradas y riesgo de deslizamiento.

Por ejemplo, en la región Andina, se presenta el desbordamiento del río Vijagual, en Apartadó, Antioquia; mientras que en Málaga, Santander, se mantiene la alerta por la creciente en la quebrada El Término.

Así mismo, hay alerta roja por alta probabilidad de ocurrencia de deslizamientos en zonas inestables de varios departamentos, como Santander, Boyacá, Risaralda, Tolima, Antioquia, Meta, Casanare, Putumayo, Chocó, Valle del Cauda, Nariño y Cauca.

Cabe mencionar que en el segundo semestre del año existe un 82% de probabilidad de la llegada del fenómeno de El Niño, lo que podría aumentar las temperaturas considerablemente.

Fenómeno de El Niño

Christian Euscátegui, miembro de la Unidad Para la Gestión del Riesgo de Desastres y consultor de alertas tempranas, aseguró en Caracol Radio, que en los próximos meses se podría presentar el fenómeno de El Niño y que se extienda hasta 2024.

Señaló que para la consolidación del fenómeno del niño, debe ocurrir al menos durante 5 meses la consolidación de condiciones de calentamiento del Pacífico y otras variables, “pero en el largo plazo, para agosto, esa probabilidad es del 80%. Para septiembre, 84% y diciembre 87%, lo que quiere decir que esa probabilidad es bastante notoria en este momento”.

Euscátegui indicó que en los próximos meses, es decir, para julio y agosto, bajo una condición normal, se presentará una temporada de menos lluvias en los departamentos de la Costa Caribe.

“Se presentaría una disminución de precipitaciones, lo que daría lugar a que se presentara una repercusión a nivel agricola y a nivel pecuario, por la baja disponibilidad de agua”, dijo.

Además se incrementan las posibilidades de sequía, desabastecimiento e incendios forestales. “La mayor repercusión estaría hacia el final y comienzo del próximo año. Es conocido por todos en el país que a finales de año se presenta temporada seca y ante una condición de niño hay lugar que haya más evaporación y la disponibilidad de agua sea menor, por lo que podríamos tener afectación en diferentes sectores de país”.