¿Cuáles son los temores que despierta la Inteligencia Artificial?

En Hora20 un nuevo tema de sociedad, el turno es para la Inteligencia Artificial, los desafíos, retos y temores que ha desperado en los últimos días. Se analizaron las ventajas de las nuevas tecnologías, el desarrollo en el aspecto social, pero también los desafíos en el plano ético y humano. Se habló de las posibilidades de la regulación, de las intenciones de enfrentar los retos a través de la inversión pública y de cómo se entiende la IA a la luz de otros desarrollos como el metaverso.

La explosión del ChatGPT ha llevado al desencadenamiento de un amplio interés por los beneficios y avances que nos entrega la Inteligencia Artificial, pues el chatbot empezó a dar respuestas de manera fácil y rápida, casi toda la información solicitada era entregada, con lo cual, se ha convertido en un escenario disruptivo para áreas como la educación y la formación académica. Incluso, los avances realizados por OpenAI, desarrollador del ChatGPT, ha generado una carrera con otras compañías como Microsoft y Google para desarrollar sus chatbot. La Inteligencia Artificial ha presentado un desarrollo acelerado en los últimos meses y cada día aparecen nuevas herramientas que facilitan la vida a cientos de profesionales, hecho que ha llevado a plantearnos la pregunta como humanidad de cuál es el límite de esta tecnología.

Recientemente dos importantes mentes del siglo XXI, como el historiador israelí Yuval Noah Harari y el considerado padrino de la Inteligencia Artificia, Geoffrey Hinton quien renunció a su trabajo en Google, han lanzado importantes alertas sobre los alcances de la Inteligencia Artificial y de las consecuencias que tenga sobre la humanidad, pues Harari ha dicho que no sabe si los humanos puedan sobrevivir a la IA, que se ha inventado algo que nos quitaría el poder y que se pone en riesgo la democracia. De otro lado, Hinton, ha lanzado importantes alertas sobre el tratamiento que se le está dando, el potencial de eliminar puestos de trabajo, de llevar a escenarios de desinformación al no poder determinar qué es verdad, o la posibilidad de que la IA termine siendo superior a la inteligencia humana, incluso ha dicho: “es difícil evitar que los malos la utilicen para cosas malas”. De igual forma, un grupo de al menos mil expertos, científicos y empresarios como Elon Musk firmaron una carta en la que piden a los laboratorios de IA detener sus investigaciones y desarrollos durante seis meses ante los “riesgos profundos en la sociedad y la humanidad”.

Lo que dicen los panelistas

Para María Isabel Mejía, ejecutiva Senior de la Dirección de Transformación Digital de CAF, asesora en Inteligencia Artificial y exviceministra de Tecnologías y Sistemas de la Información, estamos viviendo una especie de nueva generación de la inteligencia artificial que es la IA generativa, “esto quiere decir que tiene la capacidad de crear videos, textos, libros, películas, entre otros”, explicó que pasamos de una IA que nos ayudaba a detectar patrones a entender el comportamiento de la gente, a darnos recomendaciones y pasamos a una que ya tiene la capacidad de crear.

También comentó que no habría firmado la carta de los mil expertos pidiendo detener el desarrollo de sistemas de IA, pues asegura que ve que no es una opción viable y que detrás hay intereses comerciales de quienes buscan también avanzar en IA. De otro lado, manifestó que el llamado es a los gobiernos para que se trabaje desde una visión holística en regulación que combine mecanismos de experimentación en arenas regulatorias, el avance en marcos éticos y mejor infraestructura de datos.

Carles Sierra, presidente de la Asociación Europea de Inteligencia Artificial, Profesor de Investigación del CSIC y subdirector del Instituto de Investigación en Inteligencia Artificial, explicó que estos sistemas no buscan la verdad, sino la credibilidad por parte de sus usuarios, “esto tiene raíces profundas y no lo ocurrido en los últimos seis meses como se viene utilizando en el contexto educativo”. Manifestó que las consecuencias se concentrarían en que las personas crean que aquello que genera el sistema es algo correcto, aunque expuso ejemplos de aplicación correcta de la IA en el que se le pide argumentos a favor y en contra de un tema para que sirva como insumo para el debate entre alumnos y así se asuma un sentido crítico.

Andrés Rengifo, director de asuntos regulatorios y externos para Microsoft Andino Sur, resaltó que el mundo habla de inteligencia artificial desde década de los 50 y que hoy el concepto se ha vuelto muy popular, “vemos la materialización de una base conceptual, y eso es posible porque hay tres factores: más capacidad computacional donde operan de manera distribuida y eso genera más capacidad. También tener más datos y procesarlos y el tercer factor: los algoritmos, los cuales ayudan a dar sentido de la información que procesan las máquinas”.

Comentó que este momento es fascinante, pues lo califica como un nuevo renacimiento, “el hombre se pregunta su rol en el mundo, así como en el renacimiento se emancipó de la iglesia, hoy tenemos que ser ese proceso; se emancipa hacia la tecnología”.

Armando Guio, abogado, experto e investigador en regulación de Inteligencia Artificial e investigador afiliado del Berkman Center de la Universidad de Harvard, resaltó que la IA ahora plantea los desafíos del futuro del trabajo, el desplazamiento de algunos trabajos y la tecnología con funcionalidad, en ese sentido, plantea que se han explorado en actividades que eran propias de las personas y hay un riesgo en industrias que no estaban tan expuestas a este proceso, “estábamos en tareas de automatización, de sistematización, pero ahora es con diseñadores, Industrias creativas, redactores de noticias; viendo cómo se desplaza por sistemas que tienen síntesis de información”.

Sobre la discusión ética y la supervisión humana, comentó que las determinaciones y principios de estos sistemas son importantes para otras discusiones regulatorias, “una respuesta a ese reemplazamiento laboral es la regulación”.