Manchester City confirmó su presencia en las semifinales de la Champions League, luego de igualar a un tanto con el Bayern Múnich, 4-1 en el global, en el Allianza Arena.

Erling Haaland, quien erró una pena máxima en la primera parte, anotó el tanto del City en territorio alemán, 12 goles acumula el noruego en lo que va de la competición europea, mientras que Joshua Kimmich marcó el de la honra para los bávaros.

Bayern dominador, pero sin eficacia

Desde los primeros instantes se vio plasmada la firme intención del dueño de casa en remontar la serie. Ante el 0-3 en Manchester, los dirigidos por Thomas Tuchel buscaban descontar rápidamente y con ello meterse en partido.

Al cuarto de hora pudo llegar el primer tanto bávaro, cuando Leroy Sané, quien viene de un polémico episodio con Sadio Mané, recibió un perfecto pase profundo por izquierda que quiso culminar con una ‘picadita’ sobre Ederson, pero increíblemente le erró al arco. Clarísima oportunidad perdida.

El Bayern siguió generando peligro de la mano del extremo alemán, pero siempre pecó al apresurarse en el último tercio. Entretanto, el City apenas hacía oposición, estaba totalmente perdido.

Más adelante llegó el primer susto para el dueño de casa. Haaland se fue solo de cara a la portería rival, pero Dayot Upamecano lo cruzó antes de entrar al área. Ante esto, el juez central lo expulsó por roja directa acusando que era último hombre. Por fortuna para el zaguero francés, la acción fue invalidada por fuera de lugar del delantero noruego.

Los bávaros continuaron atacando, incluso Sané tuvo un tiro libre clarísimo que despejó Ederson, pero el gol jamás llegó.

Quien sí celebró fue el City pasada la media hora de partido (35′). Ilkay Gundogan recibió al borde del área y soltó un remate potente que se desvió en la mano abierta de Upamecano. Segundo error de la noche para él. Evidente pena máxima de la que Haaland se hizo cargo, pero increíblemente mandó el balón por encima del travesaño.

Manchester City aprovechó el desespero local

Para el complemento se vio a un equipo visitante mejor posicionado dentro del campo. El dominio del Bayern ya no era tan notorio. Las acciones eran sumamente igualadas.

Precisamente fue el cuadro británico quien rompió el cero. A los 57′, Kevin De Bruyne habilitó con un espectacular pase profundo a Haaland. El noruego condujo y aprovechó el insólito resbalón de Upamecano para adentrarse al área y fusilar al arquero Sommer. Noche terrorífica del central francés.

El gol, que significó el 4-0 en el global, prácticamente sentenció la historia. Los ánimos de cada futbolista del Bayern se fueron al suelo. El sueño de la remontada se tornaba imposible.

Los de Tuchel no reaccionaron sino hasta el último cuarto de hora. Al 75′, Kingsley Coman recibió por derecha, recortó hacia dentro y soltó un remate cruzado que salvó Ederson, pero en el segundo palo apareció Mathys Tel para capitalizar el rebote. Alegría efímera pues había fuera de lugar de Coman. Todo invalidado.

Ahora bien, cinco minutos después, una discutida mano dentro del área de Manuel Akanji fue sancionada por el árbitro, tras revisarla en el VAR, como penalti. Joshua Kimmich se hizo cargo y emparejó la historia. Aún así ya era tarde para la remontada.

El Bayern siguió insistiendo, con más corazón y amor propio que con fútbol, pero nada cambió. La clasificación fue para el Manchester City que ahora se medirá con el Real Madrid.