¿Cómo combatir el “achaparramiento” del maíz?
Un investigador de Agrosavia resalta que el primer paso es controlar el insecto vector.
Bogotá
Los agricultores del departamento del Tolima se declararon muy preocupados por una plaga que daña los cultivos de maíz, que ya ha causado enorme daño en el Huila y que amenaza con cuantiosas pérdidas en las plantaciones tolimenses y en otras zonas productoras de Colombia.
Se trata de una enfermedad endémica popularmente conocida como el “achaparramiento del maíz”, que es transmitida por el insecto vector conocido como Dalbulus maidis, sobre cuya presencia alertó hace dos semanas Fenalce, tras recibir información del estatal Instituto Colombiano Agropecuario (ICA).
Hablamos en Al Campo, de Caracol Radio, con el ingeniero Buenaventura Monje, investigador máster asociado del centro de investigación Nataima, de Agrosavia, quien afirmó que el paso inicial adecuado para combatir esta enfermedad es controlar el insecto.
El investigador hizo un recuento de un intenso trabajo desarrollado por Agrosavia para detectar la forma de propagación de la enfermedad, causada por dos bacterias conocidas como Mollicutes, y se encontró que el vector es el Dalbulus Maidis, un pequeño insecto que transporta en su cuerpo las dos bacterias y las transmite a los cultivos de maíz.
Este pequeño insecto succiona la savia de las plantas enfermas, se contamina y luego lleva las bacterias a otras plantas. Además, tiene capacidad de desarrollar las bacterias en su organismo.
El investigador Buenaventura Monje dijo que algunos productores de maíz han tratado de combatir la enfermedad suspendiendo temporalmente las siembras, lo cual afecta el ciclo de reproducción del insecto y ayuda a controlarlo.
Además, se avanza en el proyecto de investigación realizado por el equipo de Agrosavia, con el apoyo de varias entidades. Escuche los detalles de este trabajo en la entrevista de Al Campo, de Caracol Radio, con el ingeniero Buenaventura Monje, que puede escuchar completa en el archivo de audio anexo:
Insecto vector que causa graves daños a las plantaciones de maíz. Foto: cortesía Agrosavia
