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Devolvió cheque de más de cuatro millones de euros y su recompensa fueron dulces

El hombre no pasó por alto la recompensa y aseguró a medios locales que había sido “bastante barata”.

Crédito: Getty Images // Imagen de referencia / Andrey Popov

Un hombre alemán está causando furor por su “millonaria” historia, pues pasó de haber tenido una gran suma de dinero en sus manos a tener seis paquetes de dulces.

La historia de este sujeto difícilmente se repite o al menos no en la misma persona. Resulta que mientras daba un paseo por la calle se encontró un cheque con una jugosa suma.

Bild, un diario alemán, contó detalles de la historia de Anouar G de 38 años, el hombre que sin esperarlo obtuvo una gran suma de dinero por casualidad, pero contrario a quedarse con el cheque, decidió devolverlo.

El papel estaba dirigido a una gran cadena de supermercados en Frankfurt y estaba firmado por Haribo, una empresa de dulces famosa por sus ositos de goma.

No obstante, a pesar de que Anouar tenía una gran suma de dinero en su poder, contrario a intentar cambiar el cheque o realizar cualquier acción con este, su decisión fue devolverlo a la empresa que había expedido el papel.

Tras contactarse con Haribo, la empresa de dulces, el abogado de la compañía determinó que lo mejor sería que él destruyera el documento, por lo que el sujeto hizo caso a la petición, incluso envió una prueba de que ya lo había hecho.

¿Cuál fue su recompensa?

Sin embargo, lejos de recibir una jugosa recompensa por el acto de buena fe que tuvo Anouar y destruir el papel con la millonaria suma, lo que recibió fue “bastante barato”.

Tras unos días de haber destruido el cheque, el hombre recibió una particular recompensa por parte de la empresa de dulces.

Con lo que no contaba era con que no recibiría nada más allá que seis paquetes de dulces, algo que Anouar describió como “barato”.

“Ha sido una recompensa bastante barata”, mencionó Anouar al diario alemán, Bild.

No obstante, la compañía se defendió y se justificó respecto a la recompensa que había decidido otorgar, asegurando que el cheque que el hombre se había encontrado era personalizado, por lo que de cualquier forma no hubiera podido cobrarlo.

“Hay que poner en perspectiva el valor del objeto encontrado, era un cheque personalizado y nadie más que nuestra empresa podría haberlo cobrado”, dijo Haribo.