¿Cómo está el país a un año del paro nacional del 28 de abril?
Hablamos con un experto de los principales aciertos y fallas de la protesta social que se vivió por varios meses durante el año 2021.
Hoy se cumple un año desde el estallido de un malestar social por cuenta de diversas razones por las cuales cientos de miles de colombianos salieron a las calles a protestar.
Desde entonces, el país ha vivido numerosas manifestaciones que se prolongaron durante meses y causaron diferentes situaciones de vulneración del órden público y la violación de Derechos Humanos.
Y aunque esto puede parecer algo del pasado, este 28 de abril diferentes sectores han convocado a manifestaciones en todas las capitales del país, para conmemorar lo que ha sucedido durante todo este año ad portas de unas elecciones presidenciales.
Para hablar sobre cómo se encuentra el país a un año de este estallido social, en el noticiero de la madrugada hablamos con Carlos Mario Rave ,director del Departamento de estudios sociales y trabajo social de la Universidad de la Salle, quien desde su punto de vista como experto expresó los resultados de aquel paro nacional.
Lo primero, es que Rave asegura que si bien se han atendido asuntos puntuales de la protesta, con lo que se ha mitigado los efectos, las causas reales que obedecen a problemas de empleo, salud, educación, equidad social siguen sin resolverse.
“Las causas siguen vigentes, hoy son objetos de los programas de gobierno de los diferentes candidatos. Pero las soluciones por parte del Estado aún no son efectivas, dejando a los problemas más latentes”, aseguró.
De acuerdo al experto el principal acierto de la movilización de hace un año fue que puso estas problemáticas en la agenda pública para que los distintos sectores políticos los abordasen. Pero también, que muchas de las luchas quedaron legitimadas al mostrar el descontento con la realidad del país.
Sin embargo, también se reconoce que los principales desaciertos de la movilización tienen mucho que ver con la violencia exacerbada que se presentó.
“La violencia y la violación de derechos humanos fue lo peor que sucedió, la mala imágen que se llevaron las instituciones del Gobierno al no llevar a cabo investgaciones en contra de estas violaciones. Y sobre todo, el tratar de entender a la protesta social como un acto criminal”, concluye Rave.
Respecto al futuro de estas movilizaciones, el director asegura que la gente está esperanzada del cambio de gobierno, por lo que es difícil que se presenten nuevas unas protestas sociales que se extiendan tanto en el tiempo.
