Gobierno y Congreso de Perú piden incinerar el cuerpo de Abimael Guzmán
Esos poderes temen que sea sepultado y así se forme un lugar de culto o peregrinación por parte de seguidores
Desde que se conoció la muerte del líder de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, se creó una controversia en Perú por lo que pueda pasar con su cuerpo, pues su esposa, quien también está en la cárcel pidió que se lo entreguen. Ante eso varios sectores del país advierten contra esa posible decisión.
El ministro del Interior, Aníbal Torres, señaló que la posición del gobierno es la de incinerar el cadáver para evitar que en caso de ser sepultado se convierta en un lugar de culto y peregrinación.
"Esa petición la hacemos al tratarse de un personaje que fue un genocida, que por lo tanto al brindarle una sepultura igual que a cualquier otro fallecido puede dar lugar para que sus seguidores le rindan culto", expresó Torres a los medios peruanos.
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Desde el Congreso, la Junta de Portavoces tiene la misma posición. A través de un comunicado exigió la incineración, advirtiendo especialmente que algunos rezagos de Sendero Luminoso o el Movadef, que es su brazo político, pueden llevar a cabo alguna reivindicación.
La decisión final la tiene la Fiscalía, pero desde los diferentes poderes le recuerdan que Guzmán sería el responsable de 35.000 muertes en 20 años de conflicto en Perú y que era considerado un terrorista sanguinario.