“El derecho a protestar no es absoluto": presidente de Asofondos
Santiago Montenegro afirmó que los bloqueos y actos de vandalismo están violando el derecho a movilizarse y de trabajar de los colombianos
Críticas de Asofondos al paro(Colprensa)
Un duro pronunciamiento realizó el presidente de Asofondos, Santiago Montenegro durante el acto de clausura del congreso de Asofondos al señalar que el “derecho a la protesta no es absoluto”.
Afirmó que en las últimas semanas se han presentado protestas que están en todo su derecho, pero advirtió que con los bloqueos al tráfico automotor, con la destrucción de las estaciones de buses, con los cercos a las carreteras y a los puertos, que han generado el desabastecimiento de alimentos y combustible entre otros aspectos se están violando la libertad de los colombianos para movilizarse, trabajar, ganar su sustento y se pone en peligro su salud, vida y la seguridad alimentaria.
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Montenegro manifestó que se acusa al gobierno y a lo que llaman la élite de “todos los males de la sociedad, del incremento del desempleo, del aumento de la pobreza, de la desigualdad. Se divide a la sociedad entre el pueblo y la élite, entre buenos y malos y, los que claman ser moralmente superiores, acusan a todos los políticos, a todos los empleados públicos, a todos los jueces, a todos los empresarios de ser corruptos”
De acuerdo con el presidente de Asofondos “esto hay que dejarlo muy claro, aquí no se está cuestionando a un gobierno, a un presidente de la República, sino a toda nuestra institucionalidad”.
Añadió que, ante los continuos ataques a la democracia, “la tenemos que defender, es la única democracia posible en una sociedad libre y moderna”
Agregó que, quienes afirman que en Colombia no hay democracia argumentan, con ingenuidad o con mala fe, que es posible contar con una democracia directa, refrendaria o asamblearia y comentó que a los incautos se les debe recordar que eso no es democracia y se acercan más al fascismo italiano, al totalitarismo estalinista y al comunismo castrista, que a una verdadera democracia.
