Esta es la frecuencia óptima para tener relaciones sexuales
Según la sexóloga sueca Tanja Suhinina, tener sexo una vez a la semana es lo más saludable.
No importa cuán a menudo tengas sexo si lo haces por las razones equivocadas. Dicho esto, una vez a la semana es una de las mejores opciones, opina la sexóloga sueca Tanja Suhinina.
La Asociación Sueca para la Educación Sexual (RFSU) ha estudiado los hábitos sexuales de los suecos y encontró que una de cada cuatro personas tiene relaciones sexuales cada dos meses o incluso menos.
Esto no es suficiente, al menos si uno está en una relación, piensa la sexóloga Tanya Sukhinina. En su opinión, una vez a la semana es lo más saludable. Pero para una vida sexual sana, lo más importante es que la proximidad se debe a la motivación adecuada.
- Lee también 10 datos curiosos sobre el sexo
- Lee también Experto explicó el motivo por el cual el tamaño del pene sí importa
"A veces, la gente se encuentra en una situación en la que el sexo se convierte en la manera de resolver todos los problemas", explica la sexóloga.
Ejemplos de los motivos correctos son el deseo de divertirse y de pasar un tiempo con sentido, de experimentar una sensación de intimidad, de placer, o incluso de jugar, afirma.
Es mucho peor si una persona trata de evitar algo desagradable con la ayuda del sexo como el mal humor de su pareja, la preocupación de que algo está mal en una relación o el sentimiento de no ser amado.
- Lee también Expertos recomiendan utilizar tapabocas durante relaciones sexuales
- Lee también Conozca los beneficios del sexo mañanero
El sexo y la felicidad en una relación no están directamente relacionados entre sí. Es posible ser bastante feliz en una relación sin tener sexo a menudo, o infeliz a pesar de que tú y tu pareja tienen sexo todo el tiempo.
A veces, el sexo se usa para no pelear o con fines similares y eso es peligroso porque no deja examinar la razón real de tu falta de satisfacción.
En otras ocasiones, el sexo es tan bueno que una persona hace la vista gorda a todo lo demás, incluso a problemas serios. Es raro que el exceso de intimidad sea un problema.
Más bien puede ocurrir que hay muy poco de todo lo demás, por ejemplo, otras actividades conjuntas, junto con la incapacidad de resolver conflictos y de cuidarse mutuamente, concluye la experta.