La memoria de Guillermo Cano sigue más viva que nunca

El miércoles 17 de diciembre de 1986, sobre las 7 de la noche fue asesinado el periodista Guillermo Cano Isaza cuando salía de las instalaciones del diario El Espectador en Bogotá, a manos de sicarios del cártel de Medellín.

Tras 30 años de su muerte, su hijo Camilo Cano afirma que la memoria de su padre está más viva que nunca, y que es deber de todos los colombianos, en especial de los periodistas defender la democracia, ser éticos y no olvidar el pasado.

“Mi padre dejó una gran enseñanza para el periodismo: El periodista debe ser un ciudadano más que relata lo que sucede en la cotidianidad y no el protagonista la historia, eso hacía mi padre todos los días en su editorial”.

En conmemoración de la vida y obra de Guillermo Cano, la torre Colpatria tendrá hoy en la noche una iluminación especial.