Hasta Sarmiento Angulo, víctima de alias ‘Rasputín’

A María Lorena Gutiérrez, entonces secretaria de la Presidencia, le advirtieron que desde su correo se estaban enviando mensajes a personajes políticos del país donde supuestamente ella les advertía la tenencia de unos videos comprometedores de ellos con paramilitares. La funcionaria- según contó la Dijín de la Policía- quedó anonadada cuando le notificaban sobre sus mensajes. Incluso, porque desde sus cuentas, ella supuestamente pedía dinero a cambio de no revelar las polémicas cintas.

El 16 de abril de 2016, preocupada, Gutiérrez denunció lo ocurrido ante la Policía. Y más porque desde el correo de María Clemencia de Santos, esposa del presidente Juan Manuel Santos, también se estaban enviando correos donde supuestamente la Primera Dama pedía dinero a Alcaldías, a fundaciones, al Grupo Aval, a Unicef para atender a menores desfavorecidos de Colombia, cuando también era falso.

La Dijín de la Policía empezó a investigar. Y encontró que detrás de los falsos correos se escondía Nelson David Escorcia Ternera, alias Rasputín, el mismo bogotano que había estado condenado en la cárcel La Picota porque había contactado a un seminarista por redes sociales, habían tenido relaciones sexuales en un seminario de la capital del país y luego lo había extorsionado a cambio de no divulgar su relación. La misma persona, que privado de su libertad, imitó la voz del entonces ministro del Interior Fernando Londoño Hoyos, llamó al director de la cárcel y pidió su cambio de penitenciario.

Escorcia Ternera – encontró la Dijín- le hizo inteligencia a María Lorena Gutiérrez. Sabía de su vida, su familia, de sus más cercanos colaboradores en el Palacio de Nariño. Y copiando el tono exacto de su voz (es imitador) llamó a José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, habló con su secretaria y le pidió una cita. Lafaurie no creyó y no cayó en sus garras.

A Catalina Herrera, esposa del exsenador Martín Emilio Morales, también la llamó haciéndose pasar como María Lorena Gutiérrez. Lo mismo que a la senadora Zulema Jattin, a quien le dijo que tenía unos videos comprometedores y que si no le consignaban un dinero a un sacerdote (él se disfraza de cura), los publicaba. El general Mario Montoya, excomandante del Ejército, también fue contactado por correo y llamado por ‘Rasputín’. Igualmente el senador Iván Cepeda, según la Dijín.

Pero, ¿cómo logró ‘Rasputín’ manejar una cuenta de correo exacta a la del presidente Santos (jmsantos@presidencia.gov.co) y de otras personalidades? La Dijín encontró que Nelson David Escorcia suplantaba mediante una técnica llamada Mail Spoofing, contrataba unos servicios en internet, los pagaba y creaba dominios idénticos a los de Presidencia de la República. Utilizaba servidores en México, Australia y pagaba por falsear esos servicios en Dinamarca y así lograba generar cuentas idénticas, en este caso, del presidente Juan Manuel Santos, María Lorena Gutiérrez y María Clemencia de Santos.

Caracol Radio conoció que Escorcia también imitó voces y clonó correos de fiscales y llamó a los responsables del escándalo de Reficar y Saludcoop. “Este hombres les decía que tenía información que les podía servir, les exigía un dinero y pedía que se lo entregaran a un sacerdote en ‘x’ dirección”, le contó una fuente a este medio.

‘Rasputín’ ya había estafado a nombre de Nohora Puyana de Pastrana, esposa del expresidente Andrés Pastrana. Lo mismo que al grupo Sarmiento Angulo, el Grupo Cisneros (en el 2000 les sacó dinero), el Grupo Aval, entre otros.

“Por ejemplo: llamaba, les decía que Gustavo Cisneros estaba preso en Colombia, que necesitaban plata, cuando era falso. Les hablaba de la familia Cisneros con tanta propiedad, que los empleados del grupo terminaban enviándoles plata engañados”, contó la fuente.

En su casa en Suba, en Bogotá, la Dijín de la Policía le encontró decenas de libros biográficos de sus personajes estafados. Antes de hacerse pasar por ellos, había leído de María Clemencia de Santos, de Nohora Puyana, de la familia Cisneros, de Santodomingo, de Sarmiento Angulo, entre otros.

Este hombre- que en la Costa, en el año 2000, se hizo pasar como diplomático británico y durmió en hotel cinco estrellas mediante engaños como el ‘Embajador de la India en el Huila’- está recluido en la Cárcel La Modelo de Bogotá, mientras sus víctimas no salen del asombro de conocer los impulsos ilegales de este hombre.