700.000 afectados en sur de México por inundaciones mientras crecen los ríos

El gobernador del estado mexicano de Tabasco, Andrés Granier, sostuvo hoy que la cifra de damnificados "alcanza ya los 700.000" en esa zona del sudeste de México, azotada en la última semana por intensas lluvias, el desbordamiento de siete ríos e inundaciones masivas.
En declaraciones a la prensa, Granier explicó que del total de damnificados, unos 300.000 no pueden salir de sus casas y la mayoría permanece en azoteas o segundos pisos a la espera de ayuda.
Los afectados se encuentran "en sitio altos, pero que están aislados", agregó el mandatario local, quien ordenó evacuar a cientos de familias atrapadas en sus viviendas.
En las últimas horas, en Villahermosa, capital de Tabasco, los ríos superaban ya los diques construidos por el Ejercito y por la Armada de México para proteger a la ciudad, en la que habitan unas 300.000 personas.
"Necesitamos unir fuerzas en esta situación, no hay que desesperarnos", dijo Granier.
Mientras tanto, las cadenas de televisión locales hablan de decenas de desaparecidos en Villahermosa y su zona metropolitana.
El secretario general técnico de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Felipe Arreguín, afirmó hoy en una entrevista con la emisora W Radio que la situación de las presas en el estado de Tabasco, ubicado en el extremo sur del Golfo de México, es "crítica", porque se encuentran funcionando a su máxima capacidad.
"Tenemos una gran cantidad de puntos donde el río se está desbordando" en las cercanías de Villahermosa, una situación que se repite en otras partes de la región, precisó el funcionario.
Sin embargo, manifestó que las perspectivas son "alentadoras", porque el "pronóstico señala que las lluvias van a bajar y efectivamente ya están en descenso".
En este sentido, explicó que mientras en una estación de medición pluvial de la zona hace tres días se registraron lluvias por más de 1.000 milímetros de agua por metro cuadrado, las precipitaciones de ayer fueron "del orden de 22 y 27 milímetros".
No obstante, advirtió que esto no implica necesariamente que disminuya el nivel de los ríos, porque todavía hay grandes volúmenes de agua en lagunas y "escurriendo" por arroyos y cauces.
Villahermosa, situada a unos 50 kilómetros de la costa del Golfo de México, resiente también el efecto de la fuerte marea que impide que los ríos se "puedan descargar" en el mar, aseveró.
La Conagua prevé que a partir del miércoles de la próxima semana los ríos podrán tener de nuevo "libre flujo", explicó Arreguín.
El presidente de México, Felipe Calderón, pidió anoche a sus compatriotas enviar todo el apoyo material para los damnificados en lo que consideró la "peor tragedia de los últimos tiempos".