Con partido suspendido Boca quedó eliminado de la Copa Libertadores

El árbitro uruguayo Martín Vásquez decidió suspender el encuentro a los 34 minutos del segundo tiempo por mal comportamiento del público en el estadio La Bombonera de Buenos Aires.
La desesperación tanto de jugadores como de hinchas generó la expulsión del boquense Palermo y del mexicano Bautista. El de las Chivas le mostró cuatro dedos a la tribuna señalando los goles conseguidos en México y provocó a la hinchada. Este episodio ocurrido en el minuto 34 del segundo tiempo derivó una reacción vergonzosa de la fanaticada local y de Martín Palermo que lo buscó para agredirlo; Bautista era escoltado por la policía hasta el vestuario visitante; Mientras era conducido a ese sector, el público de manera penosa comenzó a arrojar cosas al campo sobre el mexicano; inclusive un integrante de Boca escupió a Bautista mientras iba saliendo, y peor aún un simpatizante de Boca lo golpeó.
En la parte futbolística Boca Juniors presionó durante todo el partido sobre los defensores y el arquero mexicano, pero un gran planteamiento del técnico Benjamin Galindo nunca permitió que llegara el ansiado gol xeneize. Los argentinos jugando con más desespero que técnica futbolística llegaban con base en los pelotazos, y los centros frontales como los de costado, situación que hizo que la zaga de Chivas despejara el peligro de manera efectiva. Los auriazules en el segundo tiempo jugaron con cuatro delanteros y ni siquiera de esa manera lograron anotar; Palermo, Barros Schelotto, Delgado y Palacio lo intentaron pero el arquero Corona se convirtió en la figura del partido.
De la peor manera, y gracias al mal comportamiento de sus hinchas, el tradicional equipo argentino finalizó su participación en la Copa Libertadores luego de su empate a cero goles en La Bombonera y la derrota sufrida por 4-0 en México ante las Chivas de Guadalajara.