Israel ataca oficinas de Hamas en Gaza

GAZA.--- Un helicóptero israelí disparó el martes al menos un misil contra una oficina del grupo islámico Hamas en el campo de refugiados Jabalya, en la Franja de Gaza, causando la muerte de dos personas, dijeron fuentes palestinas de seguridad.
Las víctimas fatales eran activistas de Hamas que se encontraban en el interior de una oficina donde operaba un centro de medios de Hamas, según miembros de la organización y residentes de Jabalya.
En una declaración, el ejército de Israel dijo que atacó lo que describió como un puesto de comando en Jabalya, "en respuesta a la reciente ola de criminales ataques de terror".
Funcionarios de un hospital dijeron que una escolar de nueve años que pasaba frente al edificio en el momento del ataque se encontraba gravemente herida y era sometida a una operación. Anteriormente se había informado que la niña había muerto.
Otras ocho personas, en su mayoría niños o jóvenes, resultaron heridos durante el ataque israelí, agregaron funcionarios del hospital.
Antes del ataque aéreo contra las instalaciones de Hamas, nueve palestinos y cuatro israelíes habían muerto en un lapso de 24 horas en uno de los más sangrientos brotes de violencia desde que los palestinos se levantaron hace casi 17 meses en protesta a la ocupación israelí.
La última jornada de violencia comenzó a primeras horas del martes cuando aviones israelíes atacaron dos edificios de los servicios de seguridad palestinos en Cisjordania, pocas horas después que militantes árabes mataron a cuatro israelíes, dijeron fuentes palestinas y testigos.
En Cisjordania, un misil disparado por un avión F-16 israelí destruyó la jefatura de policía en el vecindario de Al-Tira, bajo el gobierno de la Autoridad Palestina, pero no causó víctimas, dijeron fuentes palestinas de seguridad y testigos.
El ejército israelí dijo en un comunicado que el ataque fue en represalia por un atentado de militantes palestinos llevado a cabo el lunes en la Franja de Gaza donde murieron un colono judío y dos soldados israelíes.
También el lunes, un palestino que se dirigía a perpetrar un ataque con un coche-bomba mató a un policía israelí al detonar su vehículo cargado de explosivos en Cisjordania.
La policía israelí dijo que el atacante palestino también murió en la explosión del coche-bomba, activado cuando la policía se acercaba al automóvil cerca del asentamiento judío de Maale Adumim en Cisjordania, en las afueras de Jerusalén.
El colono judío y los dos soldados israelíes murieron durante una emboscada de supuestos palestinos a una caravana que transitaba por la Franja de Gaza, dijeron fuentes israelíes de seguridad. Los atacantes abrieron fuego contra el convoy en una carretera que lleva al asentamiento Gush Katif. La televisión israelí dijo que un palestino que abrió fuego contra la caravana de vehículo se suicidó posteriormente.
Desde que se iniciaron los atentados suicidas el lunes y en posteriores ataques israelíes de represalia han muerto por lo menos 11 palestinos, dijeron el martes fuentes palestinas de seguridad.
Poco antes de que se iniciara la sangrienta ola de violencia, Israel había dicho que temía que ocurriera un nuevo brote de atentados suicidas después de que las fuerzas de seguridad arrestaron a tres presuntos atacantes y frustraran el domingo una acción armada de militantes palestinos cerca de una base del ejército.
"Hay advertencias todo el tiempo", dijo el lunes Raanan Gissin, portavoz del primer ministro israelí, Ariel Sharon. "En los últimos días, lograron conseguir atacantes suicidas en cuestión de días".
El presidente palestino, Yasser Arafat, acusando a Israel por el reciente brote de violencia, se mantuvo desafiante, mientras los grupos militantes se han comprometido a continuar los ataques para vengar el asesinato de algunos de sus líderes por fuerzas israelíes.
"Este pueblo es poderoso y constante y juntos alcanzaremos Jerusalén , Jerusalén, Jerusalén", dijo Arafat a un grupo de seguidores en la ciudad cisjordana de Ramallah, donde tanques israelíes lo mantienen confinado en sus oficinas, en una medida para presionarlo a que pare los ataques.
Al menos 851 palestinos y 263 israelíes han muerto desde que comenzó el levantamiento contra la ocupación israelí luego de estancarse las negociaciones de paz en septiembre del 2000.