¿Qué tan necesaria es una reforma tributaria en tiempos de recesión?

En Hora 20 un debate para analizar a fondo la próxima reforma tributaria que presentará el Gobierno Nacional ante el Congreso en marzo. Se habló de la viabilidad de las propuestas lanzadas por el Ministerio de Hacienda, de cara a la reactivación económica y de la importancia de una nueva reforma. También una mirada al factor político y a las cargas en el congreso que definirán el futuro económico del país.

En momentos de plena recesión económica el país se prepara para discutir lo que será trigésimo primera reforma tributaria desde el año 2000; pues el aumento del gasto, una deuda pública que supera el 60 por ciento del PIB y un déficit fiscal del 8,9 también del PIB, así como la cantidad de exenciones y la falta de equidad en el sistema tributario llevan a que este gobierno en sus poco más de 18 meses hable de una segunda reforma tributaria, con algunos tintes de reforma fiscal.

Lo dicho hasta el momento por el viceministro de Hacienda, Juan Alberto Londoño es que apenas inicie la legislatura en marzo se presentará el proyecto para que entre en vigor entre 2022 y 2023; el primer objetivo es poder recaudar hasta 1,5 puntos más del PIB, es decir, unos $15 billones de pesos. Esto frente a los $13,5 billones que se buscaba recaudar con la reforma del 2019, pero que por cuenta de la pandemia claramente hubo una caída en el recaudo, pues se esperaba que en 2020 fuera de 167 billones; en el Marco Fiscal de mediano plazo se movió a los 144 y finalmente según la Dian el recaudo fue de 146 billones.

En 6AM Hoy por Hoy con Gustavo Gómez, el viceministro contó algunos puntos que se incluirán en la reforma, la cual comprende desde más personas pagando impuesto a la renta; unificar precios del IVA que están diferenciados, así como aumentar la base gravable, que hoy para el caso de la canasta familiar es del 50 por ciento. Además, de ampliar la devolución del IVA tanto en el monto como en el número de personas al que llega, pues se estima que se puede cubrir hasta 2 millones de personas. También aumentar impuestos a los estratos 5 y 6, que según el ministro puede ser de un 15 por ciento adicional; así como aumentar impuestos a quienes reciban pensiones por encima de los $10 millones de pesos. Explicó que no se busca aumentar los impuestos a las micro, pequeñas, medianas y grandes empresas.

Lo que dicen los panelistas

Julián Arévalo, decano de la Facultad de Economía de la Universidad Externado, señaló que sí se necesita la reforma tributaria, “el país tiene problemas en progresividad, equidad y eficiencia en política fiscal”, pero sostuvo que surgen preguntas si esta reforma será solo para tapar el hueco que tenemos hoy de manera coyuntural o si se da la oportunidad de corregir las fallas y tener una reforma que sea progresiva, equitativa y que borre las desigualdades.

Sobre el papel del IVA en esta reforma, apuntó que en términos de ingreso va a jugar un papel muy importante, pero que se debe mirar qué va a pasar con la clase media y la clase media baja que no va a ser cobijada por los auxilios o con la devolución del IVA.

Para Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, infortunadamente se necesita otra reforma tributaria, pues comentó que la anterior reforma buscó aumentar el recaudo, pero ante la llegada de la pandemia, los incentivos y las deducciones el panorama cambió y hoy la capacidad es limitada, “hay problemas estructurales que toca resolver”, afirmó.

Resaltó que el aumento del IVA en algunos productos podría aumentar el recaudo en máximo de 3.5 por ciento. También comentó que es una de las salidas en términos de recaudo, pues así se quiten exenciones a las empresas no es suficiente. Por último, aseguró que en un estudio que adelanta Fedesarrollo se ha logrado establecer que la capacidad de política fiscal y de gasto social para disminuir inequidades ha logrado reducir la desigualdad en unos cuatro puntos.

Jorge Enrique Bedoya, presidente de la SAC, señaló que una reforma es un asunto de contrato social y que debe ir de la mano con otros cambios en materia de empleo e informalidad. Añadió que el gobierno está intentando ser responsable pero que de alguna manera la economía se va a afectar en términos de recuperación así el ministro diga que los impuestos entran en vigor en el 2022 o 2023, al mismo tiempo comentó que una cosa es hacer la reforma y otro el contenido, “es responsable con calificadoras, pero es irresponsable ante posibles inequidades que pueda traer la reforma.”

También criticó lo que podría ocurrir con la clase media en cuanto a la devolución del IVA, ya que apunta que no solo quedan por fuera de las ayudas, sino que podrían quedar pagando renta. Por último, dijo que aumentar el IVA a la canasta familiar es una locura.

Para Ricardo Ávila, periodista y analista senior del diario El Tiempo, no hacer nada en términos tributarios generaría que la deuda pública en Colombia siga por una senda ascendente en la que el país asumiría grandes riesgos y se quitaría el grado de inversión, lo que dejaría al Estado sin formas de endeudamiento, afectando por lo tanto a empresas y ciudadanos al momento de necesitar un crédito. “No cuadrar cuentas tiene costos y esos costos a la larga uno los acaba asumiendo en materia de impacto, crecimiento y desarrollo social. Eso del deje así puede salir más costoso a la larga.”

Planteó que en el país abundan las exenciones y la deducción, pues dijo que en el panorama internacional los aportes son 70 de personas y 30 de empresas, mientras que en el país la tendencia es completamente al contrario. Además, sostuvo que la venta de Isa puede llevar a tapar el hueco de $15 billones de este año, “nos comemos la plata en ingresos de la venta de Isa este año, pero en el 2022 no queda nada. Por esa razón hay que buscar ingresos permanentes; por esto la tributaria.”