Doce años después, el fantasma del secuestro sigue vivo
Para los colombianos que vivieron el drama del secuestro en el cerro de Patascoy y fueron liberados, doce años después, aún el fantasma de estar retenidos los atormenta.

Doce años después, el fantasma del secuestro sigue vivo
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El 21 de diciembre de 1.997 las Farc, en un sangriento ataque al cerro de comunicaciones de Patascoy, asesinaron a 22 soldados y secuestró a 18, de los cuales hoy dos permanecen retenidos en poder de la guerrilla
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Durante 15 minutos cerca de 300 guerrilleros atacaron a los uniformados del Batallón de Infantería de Boyacá. Cuatro años después, como parte de los acuerdos del Gobierno de Andrés Pastrana y las Farc, salieron de la selva y fueron liberados en Meta 242 uniformados, entre ellos 16 de los soldados secuestrados en Patascoy. Ellos abrazaron la libertad a cambio de la excarcelación de 11 guerrilleros que, en un helicóptero militar llegaron triunfantes a la antigua zona de despeje
El entonces comisionado de Paz Camilo Gómez Alzate, recordó que en ese momento el país respiraba esperanza
"Había avances positivos, desde el comienzo la idea era liberar a todos los secuestrados pero a última hora se arrepintieron y no los entregaron a todos", precisó el ex funcionario
Agregó que todo esfuerzo por la liberación de una persona es pequeño y que desde esos intentos de liberación no se ha observado una búsqueda real de liberación
Sin embargo, para estos colombianos el drama del secuestro no terminó con la liberación. Hoy, doce años después, aún el fantasma no se va y, como relata Sofía Martín, esposa del soldado Fabián Cerón, cada noche los atormenta
"El está como perdido, no reacciona de forma coherente, y la psicóloga ya me dijo que el no va a ser la persona que yo conocí antes del secuestro", sostuvo
Igualmente sostuvo que a ella le ha tocado trabajar y estar pendiente del hogar porque el exmilitar que recién liberado salió con ánimos y proyectos de trabajo y hoy ya no se entusiasma con nada. Sandra Castillo y el uniformado Jorge Darío Bravo aún viven juntos, tienen una hija de siete años, pero el ex militar poco la ve, porque permanece ido, solitario, como secuestrado
"El es un hombre alejado, tiene pesadillas es agresivo, no soporta el ruido y por eso está muy alejado de la niña, no está en condiciones para estar con ella", precisó
Tomando medicamentos, con mucho temor, con niveles altos de agresividad y miedo pasa su vida otro de los liberados el ex soldado Luis Aníbal Andrade, su suegra Bertha Clemencia sostuvo que son pocos los momentos de calma que tiene el hombre que no trabaja y pasa los días aferrado al recuerdo del cerro de Patascoy
"Es se volvió agresivo, permanece enfermo, si se toma la droga se calma pero luego le paso el efecto y vuelve a lo mismo", indicó
La mujer añadió que de la selva llegó un hombre "furioso con demasiada rabia"
Hoy mientras que las familias de Moncayo y José Libio esperan la liberación de los uniformados, 12 años después, los que ya fueron entregados y sus seres queridos entienden cada día que el secuestro no se olvida y el espíritu nunca regresa a la libertad después de permanecer encadenado en la selva



