Comunidades del Norte y Nordeste temen por represalias de las disidencias

Antioquia

Ricardo Abel Ayala Urrego, alias Cabuyo Ingresó al frente 36 de las extintas Farc en el 2010 como miliciano del que en su momento era el frente más activo del bloque Iván Ríos en Antioquia.

Durante las negociaciones en el proceso de paz entre el gobierno nacional y las extintas Farc alcanzó a ser nombrado como representante del plan piloto de desminado humanitario en la vereda Orejón del municipio de Briceño. Cabuyo también estuvo en la vereda La Plancha de Anorí donde estuvo recibiendo los beneficios del proceso de paz.

Esta persona está señalada de múltiples delitos, entre homicidios, desplazamientos y amenazas en el Norte y Nordeste de Antioquia, precisamente José David Hernández, representante legal de la Asociación Campesina de esas poblaciones aseguró que, si bien es un golpe muy fuerte a esa estructura, también teme por posibles represalias que puedan tomar los hombres que estaban bajo mando de cabuyo.

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“La muerte de un guerrillero no va a terminar el conflicto y, por el contrario, pensamos que posiblemente se agudice mucho más el conflicto en el territorio con la muerte de Cabuyo, porque de pronto vendrán represalias del grupo insurgente que hay en el territorio”.

El analista del conflicto, Jaime Fajardo Landaeta, aseguró que posiblemente el delincuente abatido había salido de la zona de injerencia por problemas de salud que le quedaron en los operativos un primo de alias Cabuyo sería el más posible sucesor.

“Eso va a seguir, caen unos y se levantan otros. Lo más seguro es que un primo de él que hace parte de esa disidencia, lo más seguro es que se va poner al cabeza del grupo”.

Jhon Marulanda, militar retirado y analista del conflicto armado aseguró que este golpe significa una tranquilidad para las poblaciones del Norte y Nordeste.

“Este es un golpe certero a la cabeza de una de las organizaciones narco criminales que se siguen moviendo. Toda la gente de esa zona del Norte y Nordeste tiene un fresco de tranquilidad porque uno de los principales acosadores cayó en un enfrentamiento”.

Miguel Ángel Peláez, el alcalde del municipio de Yarumal donde ocurrió la masacre de los geólogos el pasado 2018, celebró este golpe de las autoridades y dijo que sacan de circulación a alguien le hizo mucho daño a las comunidades.

“Él se dedicó a dirigir esas disidencias del frente 36 que tanto daño le han hecho al Norte de Antioquia y tanta confrontación y economías ilegales que han generado”.