Cadena humana hoy por una Buenaventura en paz
La cadena arranca en el kilómetro 0 al kilometro 22
Imagen de referencia / Alcaldia de Buenaventura
Cali
Serán 22 kilómetros los que se esperan cubrir con todos aquellos que queren a Buenaventura para que se escuche en el mundo el clamor de paz con camisetas y pañuelos blancos.
La actividad inicia a las 10:00am, en el kilómetro cero desde el Bulevar del centro, allí Monseñor Rubén Darío Jaramillo Montoya, Obispo de la Diócesis, iniciará la Cadena Humana con las distintas autoridades y líderes, desde un carro de bomberos bendecirá a la población que a los lados en la avenida Simón Bolívar en el sentido isla-continente hasta el corregimiento de Córdoba a la salida de Buenaventura.
"Detrás del carro de bomberos va una carroza fúnebre mostrando la muerte de nuestros hermanos y la muerte que nos ha redeado, luego va una comparsa de alegría y unos jóvenes encapuchados que van a tener en sus manos instrumentos musicales en cambio de armas", comentó el obispo.
Los jóvenes siguen siendo las víctimas en Buenaventura y no solo los que pertenecen a las bandas criminales, sino otros que nada tienen que ver, sólo por traspasar fronteras invisibles que son imperceptibles para la comunidad, reconoció Monseñor Jaramillo, al mismo tiempo afirmó que las ráfagas se siguen escuchando y que los robos se han incrementado "parece que esta gente desafía al Estado colombiano y todavía no han parado, hemos visto más presencia de la policía, de la armada, pero las noticias nos siguen mostrando que siguen disparando y siguen matando".
- Defensa de fiscal de Cali niega que su cliente esté al servicio de narcos
- En Cali atienden dos menores heridos en ataque en río Napi, en Guapi
- Valle baja nivel de alerta hospitalaria de roja a naranja por COVID-19
La armada tambíen se une hoy a la cadena humana por la paz y la vida el Coronel de infantería de Marina José Domingo Cantillo Caro Comandante encargado de la Brigada de Infantería de Marina número dos, expesó que es un mensaje del pueblo para decirle a los criminales que "¡no más!, no vamos con la violencia en el puerto".
