Iglesias en el Atlántico podrán reabrir este fin de semana
El aforo permitido dentro de los templos es máximo de 50 personas
Este domingo abrirán las primeras iglesias y templos religiosos en Barranquilla y municipios del Atlántico bajo estrictos protocolos de bioseguridad, según anunciaron las autoridades.
En los municipios, después de una reunión virtual liderada por la gobernadora Elsa Noguera, se revisó lo establecido en los lineamientos nacionales para hacer la reapertura de los servicios religiosos en el Departamento, implementando los protocolos de bioseguridad para mitigar, controlar y evitar el riesgo de contagios de COVID–19.
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La mandataria agregó que el reto es mantener una baja velocidad de contagio, pese a que tenemos que volver a la vida productiva. “En esta nueva realidad, volver a los servicios religiosos es clave porque la gente lo está necesitando; el fortalecimiento espiritual se necesita hoy más que nunca”, indicó Elsa Noguera.
De acuerdo con el Decreto 1168, expedido por el Gobierno Nacional el pasado 25 de agosto, desde el 1 de septiembre está permitido en todos los municipios la reapertura de iglesias y cultos religiosos ya sean de baja, moderada o de alta afectación del COVID-19, siempre y cuando no impliquen aglomeraciones y no superen la presencia de 50 personas. También se debe asegurar el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad expedidos por el Ministerio de Salud y Protección Social.
El presbítero Pablo Mendoza afirmó que las iglesias han permanecido unidas trabajando de la mano con el Ministerio del Interior, las autoridades locales y departamentales para implementar de forma correcta los protocolos. “Tenemos muchas expectativas de volver a los templos y somos conscientes de que debemos hacerlo con orden y responsabilidad evitando las aglomeraciones. Queremos ser parte de la solución y no del problema”, agregó.
Según los representantes de las iglesias cristianas y católica, la mayoría ya está aplicando el protocolo autorizado para reabrir, tal como lo avala la Resolución 1120 de 2020, y están listos para volver a ofrecer sus servicios con los respectivos equipos de bioseguridad y personal de apoyo encargado para iniciar el plan piloto durante 15 días.
Algunas de las medidas de bioseguridad que deben seguir las iglesias para garantizar una reapertura segura y gradual de sus templos son: mantener el distanciamiento físico de dos metros, el aforo máximo dentro de los recintos es de 50 personas, uso obligatorio de tapabocas, todo el personal que apoye la celebración debe estar capacitado en las medidas generales de bioseguridad y sobre la identificación de signos y síntomas del COVID-19. Asimismo, deben tomar la temperatura al ingreso, prohibir la entrada a personas con fiebre y desinfectar todas las instalaciones. Garantizar la ventilación de los lugares de culto, manteniendo puertas y ventanas abiertas; y por ninguna razón, se debe compartir papelería o documentos de mano a mano.
En la salida y fin del acto religioso, la logística debe garantizar que no se rompa el distanciamiento físico de dos metros entre personas y que no se lleve a cabo ninguna actividad que implique manipulación de alimentos.