Juez suspendió la orden de cierre de la planta de aguas residuales de Bello
El juez cuarto de ejecución civil de Medellín dio a EPM 4 meses para eliminar los malos olores que han generado el malestar.
Antioquia
El juez cuarto de ejecución civil de Medellín falló a favor de EPM la tutela con la que pidió la nulidad de la orden policiva de suspender la operación de la planta de aguas residuales Aguas Claras en Niquía, municipio de Bello.
La decisión judicial ordenó a la Inspección Primera de Policía de Bello para que, en máximo 48 horas, suspenda el acto administrativo de sellamiento y cierre de esa planta de tratamiento que administra la empresa filial Aguas Nacionales.
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Sin embargo, el fallo del juez también determina que en un plazo de cuatro meses, EPM debe completar todas las 36 acciones y eliminar los malos olores que han afectado a más de 9 mil personas en esa zona del norte del Valle de Aburrá.
Tras ser notificado del fallo, el inspector primero de Bello, Juan Sebastián Montoya, dijo que si se cumple el plazo y no hay solución a los malos olores, podrá ordenar nuevamente el cierre de la planta.
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“El juez le ordena a EPM que en un periodo no prorrogable de cuatro meses deban cumplir con todas las acciones que se comprometieron con la comunidad. Eso quiere decir que en ese periodo deben desparecer todos los olores de la plata de aguas residuales”, aseguró el inspector.
Hasta ahora, EPM y los representantes de los afectados se han reunido una sola vez sin acuerdos, pero se espera que en los próximos días hagan un encuentro para definir las nuevas acciones para darle solución a los malos olores.
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La compañía antioqueña ya ha aplicado 21 de las 36 acciones que anunció en febrero para intentar controlar los malos olores a excrementos y químicos en la planta, que han afectado directamente a las familias del sector de Niquía y Fontidueño.