Medimás niega atención a paciente en Cartagena, a pesar de fallo judicial
Es el caso de Daniela Camacho, quien padece de autismo y desde 2015 le fueron suspendidas sus terapias, provocando comportamientos agresivos.
Cartagena de Indias
Un drama afronta la familia de Daniela, una joven con autismo que presenta comportamientos agresivos que la llevan a autolesionarse, en Cartagena. La joven recibía terapias que habían mejorado su estado de salud en una entidad, pero dichas terapias fueron suspendidas en 2015 por la deuda de la entonces Saludcoop, y desde entonces su sucesora, Medimás, no ha vuelto a autorizar las terapias.
"Ella desde 2001 estaba en ese centro y le conocen su historia clínica. Antes de iniciar en esa entidad se comportaba violentamente y se agredía, se mordía, se tiraba al suelo, corría sin rumbo fijo, y durante su tratamiento en Esco su comportamiento mejoró", advierte el padre de la joven, Marlon Camacho, sobre la importancia de las terapias para su hija.
"Desde 2015 la entonces Saludcoop debía dinero a Esco, la fundación donde le hacían las terapias, y se las suspendieron por culpa de la EPS. Y desde ese momento, no hemos recibido ninguna terapia", dice Camaco.
El abogado Antonio Hernández, quien asumió el caso, cuenta que ya existe un fallo judicial y un desacato contra Medimás, que sigue sin cumplir con ellos.
"La señorita Daniela tiene un problema de autismo y la entidad Medimás no quiere remitirla a la entidad que puede darle los servicios y que tiene los elementos adecuados, que es Esco. Hay un fallo judicial del 29 de noviembre de 2017, y la entidad Medimás a pesar de haber sido notificada, no han obedecido ese fallo", sostiene.
El miedo del padre de Daniela es que, por su comportamiento agresivo, llegue a causarse alguna lesión grave que ponga en riesgo su vida.