Niño de 11 años ingresó caminando a resonancia magnética en clínica de Cartagena y terminó muerto
Sus familiares exigieron a las autoridades esclarecer el caso

Caracol Radio
Cartagena
Lo que debía ser un examen médico sin complicaciones terminó en tragedia. Mateo Andrés Brieva Arellano, un niño de 11 años, falleció luego de permanecer casi dos meses en coma tras someterse a una resonancia magnética en la Clínica Buenos Aires.
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Catrina Arellano, madre del niño, denunció las extrañas circunstancias que rodearon la muerte de su hijo, cuyo estado de salud se deterioró gravemente tras la resonancia magnética bajo sedación.
Mateo, un niño alegre y aficionado al fútbol, ingresó a la clínica caminando el 6 de agosto para realizarse el procedimiento. Dos meses después, murió en la Unidad de Cuidados Intensivos de la Clínica Casa del Niño.
Así inició la tragedia
La madre de Mateo, Catrina Arellano, denunció en Caracol Radio que la resonancia magnética fue ordenada por un ortopeda para confirmar si al niño le había quedado algún residuo de vidrio en la planta de su pie derecho, tras una herida sufrida meses atrás que requirió siete puntos de sutura. Aunque Mateo ya había sido operado para extraer tres pedazos de vidrio, seguía quejándose de dolor, lo que motivó el examen bajo sedación.
Catrina Arellano acompañó a su hijo hasta que lo subieron a la cápsula de resonancia. Tras ser retirada de la sala, le indicaron que la llamarían en 15 minutos para ayudar a reanimarlo. Cuando volvió a entrar, el panorama era desolador.
“Cuando yo entro, la enfermera me dice: mamita, ayúdelo hágale cosquilla, háblele para que él vaya despertando. Cuando yo empiezo a hablarle veo que todos los niños despiertan, menos mi hijo, él estaba morado, tenía sus labios blanquitos y no reaccionaba”.
Al revisarlo, el personal médico confirmó que Mateo no presentaba signos vitales. La doctora que lo atendió gritó: “Sáquenla, sáquenla, que el niño falleció”.
Aunque el personal logró reanimarlo, el estado de Mateo era crítico y por eso fue trasladado de urgencia a la Casa del Niño.
Luchó por su vida dos meses
En la Casa del Niño, Mateo fue ingresado a reanimación. Los médicos informaron a la familia que el niño había entrado en un “paro respiratorio” en la Clínica Buenos Aires y que estaba en un “coma profundo”. Le advirtieron que era “un milagro de Dios que el niño pase de hoy”.
Después de casi 20 días hospitalizado, una junta médica y el neurólogo determinaron que el niño tenía “muerte cerebral”.
El niño fue sometido a múltiples procedimientos, incluyendo una traqueotomía y una gastrostomía. Mateo Brieva Arellano falleció después de dos meses hospitalizado.
“Pedimos justicia”
Catrina Arellano denunció que, además de la tragedia, la Clínica Buenos Aires tardó cinco días en entregar la historia clínica completa a la Casa del Niño, la cual fue enviada por correo electrónico. A la fecha, la madre asegura que no la han entregado físicamente ni tampoco los resultados de la resonancia magnética.
La familia ha iniciado un proceso legal ante la Fiscalía General de la Nación para que se aclare exactamente lo que le sucedió a su hijo en el centro asistencial.
“Quiero justicia que me aclaren qué lo que realmente le pasó a mi hijo. Porque hasta el sol de hoy después de haber enterrado a mi hijo, no sé qué condiciones, qué le colocaron a mi hijo, qué anestesia y qué fue lo que pasó en esa resonancia. Quiero justicia y quiero que me aclaren qué le pasó a mi hijo”, indicó.




