En Villa de Leyva, Boyacá, fue encontrado el tiburón más grande y antiguo del mundo
El fósil de este tiburón gigante encontrado en la vereda Cañuela, que es pariente del tiburón blanco, sería de hace 114 millones de años.

Este es el equipo de trabajo que identificó el fósil de tiburón gigante / Foto: Cristian David Benavides Cabra, magíster en Geología de la UNAL.
Villa de Leyva
En el municipio de Villa de Leyva identificaron un fósil de un tiburón gigante de hace 114 millones de años, siendo uno de los mejores ejemplares de Protolamna ricaurtei y el tiburón gigante más antiguo del orden Lamniformes conocido en el mundo.
Un habitante de la vereda Cañuela, en el municipio de Villa de Leyva, Boyacá, fue quien encontró en 1993 fragmentos de roca con vértebras y dientes en su interior. Tiempo después, la comunidad entregó el hallazgo a la Fundación Santa Teresa de Ávila, que lo resguardó hasta ponerlo en manos de investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) y del Servicio Geológico Colombiano (SGC) quienes tras muchos análisis e investigación encontraron que estas piezas pertenecían al tiburón más grande y antiguo del planeta.
“Este fósil fue encontrado en los años 90 por un habitante de la región de Villa de Leyva. Luego fue entregado a la Junta de Acción Comunal de la vereda donde tiempo después fue llevado a la Fundación Santa Teresa de Ávila en Villa de Leyva y desde la Universidad Nacional nosotros, fuimos a esta fundación y tuvimos conocimiento de este espécimen. En el 2018 empezó el estudio y fueron más de siete años hasta que hace poco salió ya la publicación con todos los resultados de todo el trabajo que se realizó. Este es un tiburón lamniforme, que es un grupo de tiburones que existen actualmente. Algunos de ellos, el que sería más famoso es el tiburón blanco”, afirmó Cristian David Benavides Cabra, Paleontólogo boyacense de la Universidad Nacional y del Servicio Geológico Colombiano.
Tras los análisis y estudios que realizaron los especialistas, estos arrojaron que las piezas encontradas tenían músculos y piel preservadas.
“Cuando lo empezamos a preparar nos dimos cuenta que además de tener las vértebras, de tener dientes, este espécimen es muy especial porque tiene piel, tiene músculos preservados, que es algo muy raro en el registro fósil de cualquier parte del mundo, pues de poder encontrar este tipo de tejidos preservados. Cuando hacemos algo que llama la preparación del espécimen, básicamente removemos la roca que rodea lo que sería el fósil. Eso lo hacemos por medios mecánicos, ayuda de martillos neumáticos y por medios químicos, con la ayuda de ácidos que se utiliza de una manera controlada para poder diluir la roca o quitar la roca que rodea el fósil”, agregó Benavides Cabra.
Hay que señalar que este ejemplar reúne al menos 107 vértebras, más de un centenar de dientes, restos de cartílago, pequeños dientes en la piel y fibras musculares. Para los paleontólogos es un hallazgo extraordinario, ya que los tiburones están formados principalmente de cartílago y rara vez se preservan completos. Por lo general solo perduran sus dientes, que son la parte más mineralizada.
“La diferencia de este nuevo ejemplar que era mucho más completo y que al analizar el tamaño de sus vértebras, que teníamos al menos 107 vértebras preservadas y más de al menos 100 fragmentos de dientes preservados, nos dio información de que primero este era un tiburón gigante que medía más de seis metros y que hasta el momento lo que se conoce, este sería el registro del tiburón gigante más antiguo del mundo”, manifestó.
El fósil de este tiburón permanecerá en la Fundación Santa Teresa de Ávila en Villa de Leyva.



