Xiana combina sus raíces tropicales con un pop fresco y moderno
En la parte creativa, esta cantautora ha compartido composición con Bobby Sierra, y su sonido cuenta con la experticia técnica de figuras como Pamela Velázquez

Cortesía
Xiana, es una cantautora del Caribe Colombiano, cuya identidad musical se forjó entre sonidos tropicales, jazz, flamenco, boleros y son cubano.
Ingresa al grupo de alertas de Caracol Radio Cartagena
Su propuesta combina esas raíces con un pop fresco y moderno, dando como resultado una fusión tropical que ha conquistado una audiencia digital sólida: más de 400 mil seguidores, alto nivel de interacción y clips virales que narran su historia de amor y conectan de forma genuina con su público.
En sus lanzamientos recientes, trabaja de la mano de Jheral, productor y artista cartagenero reconocido por sus colaboraciones con Mr. Black.
En la parte creativa ha compartido composición con Bobby Sierra, y su sonido cuenta con la experticia técnica de figuras como Pamela Velázquez (ingeniera de artistas como Anitta, Maluma y Paulina Rubio) y Robert Taylor (referente de la industria latina con créditos junto a Marc Anthony y Luis Fonsi).
Su propuesta también se nutre del talento de músicos de trayectoria internacional como Federico Ochoa (saxofonista e investigador musical), Carlos Palmett (baterista de Pitbull) y Jorge Otero (saxofonista que ha acompañado en vivo a Rubén Blades y Oscar D’León).
La canción de lanzamiento se titula Barú, es un himno al alma y a la celebración de la vida. Su nombre nace de Barú, ese tesoro del Caribe colombiano, una península cercana a Cartagena que muchos llaman isla, rodeada de playas de arena blanca y rosada, aguas cristalinas y la calidez del sol tropical.
Un lugar que inspira libertad, alegría y renacimiento.La canción celebra Barú como un refugio paradisíaco en la mente: ese espacio donde, al llegar, las penas se disuelven, el calor del sol acaricia el alma y todo dolor parece desvanecerse entre la brisa y el murmullo del mar.
Barú es un canto íntimo que celebra nuestras propias victorias, el hecho de levantarnos después de cada caída y de reconocer que, tras los obstáculos, siempre existe un espacio seguro, luminoso y feliz dentro de nosotros.



