Hay pérdidas de $3600 millones por combustible que se dejó de comercializar: Comce ante paro Boyacá

El desabastecimiento de combustibles en Boyacá se ha agudizado, con estaciones cerradas o en mínimos históricos en municipios como Paipa, Sogamoso y Duitama.

Esta crisis, provocada por bloqueos derivados del paro en Boyacá y protestas en zonas de páramo, impide el paso de carrotanques, afectando el transporte, el comercio y la actividad rural.

La Confederación de Distribuidores de Combustibles y Energéticos (Comce) advirtió que urge establecer corredores humanitarios. La situación denota la vulnerabilidad logística del departamento y demanda acciones inmediatas.

En este orden de ideas, David Jiménez, presidente de la Comce, estuvo en 6AM para hablar de la problemática de desabastecimiento de combustibles que hoy afecta al país.

¿Qué está pasando con la gasolina y el combustible en Boyacá?

Jiménez afirmó que hay señales de desabastecimiento en estaciones de servicio de Boyacá, debido al paro minero iniciado el lunes 4 de agosto.

Adicionalmente, indicó que el martes 5 se dejaron de comercializar más de 270.000 galones diarios, lo que representa una pérdida de aproximadamente 3.600 millones de pesos para el sector; señaló que la venta de combustibles líquidos es un servicio público esencial y, al verse afectado, también lo hacen las demás actividades económicas del departamento.

También hizo un llamado al Gobierno para que llegue a un acuerdo pronto y se resuelva esta situación crítica. “Hasta el momento, nosotros no hemos recibido ninguna comunicación por parte del Gobierno Nacional, que es la autoridad que regula la cadena y la distribución. Pero ojalá que eso no suceda”, agregó.

¿Para cuánto tiempo alcanzan los inventarios de combustible?

Desde su perspectiva, Jiménez explicó que la cantidad de combustible que maneja cada estación de servicio varía según su tamaño y tipo. Algunas estaciones son más grandes y venden más volumen, mientras que otras son más pequeñas y tienen menor capacidad de comercialización.

Esta diferencia hace que el impacto del desabastecimiento no sea uniforme en todo el departamento. “De las 240 estaciones de servicio identificadas en el departamento, la rotación de inventario promedio, sin abastecimiento a las estaciones, puede durar de dos a tres días”, agregó.

Sin embargo, señaló que, en términos generales, en Boyacá se comercializan diariamente alrededor de 400.000 galones de combustibles líquidos, entre gasolina corriente y diésel. Esta cifra refleja de la magnitud del consumo y de la importancia del suministro continuo en la región.

¿Es posible que se modifiquen los precios del combustible?

Jiménez dijo que no está permitido subir el precio de los combustibles ante la escasez, ya que en Colombia estos precios están regulados por ley y responden a una política pública establecida por el Gobierno Nacional.

En Boyacá se aplica un régimen de libertad vigilada en ciudades principales como Tunja, donde no hay un precio máximo, pero sí uno sugerido.

En la mayoría de municipios rige la libertad regulada, lo que implica que se establece un precio máximo de venta al público. Por tanto, incluso ante el desabastecimiento, no debería haber un incremento en los precios. Sin embargo, el paro “sí afecta el costo del transporte y se hace más oneroso el traslado entre plantas de abastecimiento y estaciones de servicio por las demoras y bloqueos, y eso sí puede llegar a incrementar el costo en la estación”, concluyó.