Crisis humanitaria en zona rural de Segovia: comunidades denuncian confinamientos
También denuncian que dos jóvenes fueron retenidos el pasado sábado por el grupo ilegal Clan del Golfo; uno fue liberado y el otro sigue en su poder.
Grupos ilegales- foto archivo cortesía / Colprensa/Archivo
Segovia- Antioquia
La situación de seguridad por cuenta de la lucha de poder entre los grupos ilegales en Antioquia cada día afecta más a las comunidades. Como en el Norte, Bajo Cauca, Occidente, Nordeste, entre otras. Donde se registran confinamiento, amenazas, retenciones e intimidaciones.
La semana anterior se reportaban desplazamientos y confinamientos en Valdivia. Allí la cifra supera las 60 personas que abandonaron la vereda La Llana y otras vecinas por los combates entre Clan del Golfo, ELN y disidencias. Pero, mientras eso ocurría en el Norte, las comunidades de la zona rural de Segovia en el Nordeste padecían el asedio de los mismos actores.
Según la denuncia, el pasado fin de semana un grupo ilegal habría retenido a varias personas contra su voluntad y sacadas de uno de los caseríos en conflicto. La comunidad no sabe nada del paradero de una persona, asegura la fuente.
“En la tarde del día sábado, en el sector El Alto del Chispero, en la salida de los paramilitares en esa parte llamada El Chispero, retuvieron a dos jóvenes, de los cuales soltaron a uno el día domingo y el otro continúa retenido”.
Algunas personas de la zona rural de Segovia quisieron llamar la atención de las autoridades sobre la dura situación que, según ellos, viven las veredas Altos de Manila, Mina Nueva, El Paraíso, El Chispero y Chicamoqué, esta última más cerca de Puerto López en El Bagre. Donde indican, están confinados por los constantes combates.
Según las fuentes, que se animan a contar lo que ocurre, pero ante el peligro inminente solicitan, como en otras ocasiones, la protección de su identidad, piden la intervención de la fuerza pública, ya que las comunidades de las veredas antes mencionadas están en zozobra y no se atreven a salir a conseguir el sustento ante el temor de quedar en medio del fuego cruzado.
“Los habitantes de las veredas Alto de Mañila, Mina Nueva, El Paraíso, El Chispero y Cañaveral Chícamoqué solicitamos la presencia de la fuerza pública en nuestros centros poblados para preservar nuestras vidas”.
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Recuento de la situación
Las fuentes indicaron que la situación que venía en una tensa calma se agudizó con la llegada de una tropa del Clan del Golfo el pasado 26 de julio a una zona en límites con las veredas Las Manuelas y Altos de Manila, distantes de los caseríos, pero con intención de tomarse este último centro poblado que es bastante grande y donde ha permanecido históricamente la guerrilla del ELN.
El relato continúa indicando que el lunes y martes llegó la guerrilla a los caseríos. Ahí recalcan que hubo una tensa calma, pero no hubo combates; pero al finalizar la semana, es decir, al iniciar el mes de agosto, se repliega el ELN y de nuevo avanzan los enemigos que coparon más espacios y es cuando retienen a los jóvenes. En ese momento se reportaron combates porque la guerrilla se devolvió. Las confrontaciones de este fin de semana ocurrieron en Chicamoqué, Chispero y Paraíso, cerca de Mina Nueva, menciona la denuncia.
Las personas que relatan esta situación indican que, si los grupos se quieren enfrentar, que lo hagan lejos de los civiles y que no los involucren en el conflicto; ahí recalcan la importancia de la presencia de la fuerza pública.
Recordemos que las fuentes agregan que el otro conflicto está cerca de Sur de Bolívar, por la vereda Panamá y Tamar, donde el conflicto entre los mismos se agudiza hacia ese vecino departamento.
