Sincelejo

Gobierno recupera predio vinculado a exsenador investigado por parapolítica y lo entrega a víctimas

Un total de 25 familias de San Benito Abad (Sucre) recibieron 263 hectáreas que habían sido controladas por estructuras ilegales, en un acto de reparación territorial y avance de la Reforma Agraria.

Tierras con nexos parapolíticos pasan a agropescadores de Sucre.

Tierras con nexos parapolíticos pasan a agropescadores de Sucre.

Montería

La Agencia Nacional de Tierras (ANT), en coordinación con autoridades judiciales y policiales, concretó la recuperación material del predio Pasatiempo, un terreno de 263 hectáreas ubicado en la zona rural de San Benito Abad, Sucre.

La propiedad estaba vinculada a Héctor Julio Alfonso López, exsenador investigado por presuntos vínculos con el Bloque Norte de las AUC e hijo de Enilce López, conocida como ‘La Gata’, empresaria del chance condenada por delitos de alto impacto.

La diligencia se enmarca en un proceso de extinción de dominio liderado por la Sociedad de Activos Especiales (SAE), debido a graves acusaciones contra el exsenador, incluyendo parapolítica, lavado de activos, enriquecimiento ilícito y financiación de campañas con recursos de grupos armados ilegales.

Durante la intervención, el director de la ANT, Juan Felipe Harman, destacó que esta acción refleja el compromiso del Gobierno nacional con la justicia agraria: “Estamos devolviendo tierras a quienes las necesitan. Aquí, 25 familias campesinas y pescadoras recibirán un espacio para trabajar y vivir en paz”.

El predio, que limita con la ciénaga Punto de Blanco, fue asignado a la Asociación de Pescadores y Agricultores Víctimas del Conflicto de Doña Ana, un colectivo que por años sufrió desplazamiento y violencia paramilitar.

Harman enfatizó que esta entrega simboliza un paso clave en la Reforma Agraria: “Estas tierras ya no alimentarán el crimen, sino la soberanía alimentaria y la reconciliación”.

Un acto de reparación histórica

Para las comunidades, la recuperación del Pasatiempo representa un acto de reparación histórica. Cristina, una de las beneficiarias, compartió su emoción: “Recibir estas tierras nos llena de alegría. Hoy es un día histórico porque la Reforma Agraria se está cumpliendo”.

La entrega no solo restituye derechos territoriales, sino que también protege la ciénaga, afectada durante años por actividades ganaderas irregulares promovidas por los antiguos ocupantes.

La articulación entre la SAE y la ANT ha permitido transformar escenarios de violencia en oportunidades de desarrollo rural.

Según la ANT, esta acción refuerza la paz territorial en zonas históricamente dominadas por estructuras criminales, priorizando a poblaciones vulnerables como campesinos y pescadores. “Gobernar para los territorios implica devolverles su potencial productivo y social”, agregó Harman.

Con esta medida, el Gobierno nacional reafirma su estrategia de combatir el latifundio ilegal y fortalecer la economía campesina. Las 25 familias de San Benito Abad, ahora dueñas legítimas del Pasatiempo, encarnan un cambio tangible: tierras que antes simbolizaban impunidad hoy son sinónimo de esperanza y reconstrucción.

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