Colombia

En alocución presidencial, el presidente Gustavo Petro ofreció un detallado balance sobre la situación de seguridad en el pais, el mandatario abordó temas como la ofensiva contra disidencias, el papel del ELN, la cooperación con Venezuela y la creación de la Zona de Ubicación Temporal (ZUT) en Tibú, Norte de Santander.

El presidente negó que exista un “caos de violencia” en Colombia, como aseguran sectores políticos y algunos medios: “No hay un caos de violencia. Esa es una mentira política y mediática. Las cifras de homicidios muestran una leve tendencia a la baja, aunque no lo suficiente para cantar victoria”, aseguró Petro.

Sobre el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el presidente aseguró que el grupo armado eligió el camino del narcotráfico: “Han decidido la guerra y el traqueteo. Eso los consumirá. Triste manera de acabar un proyecto que hablaba de emancipación humana y revolución. Ni siquiera las FARC cometieron ese error”.

El mandatario aseguró que la colaboración entre Colombia y Venezuela ha funcionado en la lucha contra estructuras criminales en la frontera. “Venezuela nos está ayudando contra el ELN en el Catatumbo. Han capturado alcaldes narcos y decomisado más de 30 toneladas de cocaína. Por eso era necesario tener relaciones diplomáticas sanas. No se puede abandonar la frontera a la mafia, como lo hizo Duque”, afirmó Petro.

Criticas a jovenes en paz

El presidente Gustavo Petro también cuestionó a sus funcionarios por la baja ejecución en programas como Jóvenes en paz, que según las cifras oficiales logró 432 cupos en 71 municipios priorizados.

“Hay que comenzar a hablar del fracaso de la política de jóvenes en paz. nosotros habíamos planteado 100 mil jóvenes 432 es un es una un margen bajo, es competir con las mafias en la atracción del jovenes (…) Jóvenes en paz tenía la misión de pagar por estudiar. La magnitud del programa por miedos y enredos mentales de funcionarios del centro bogotanos es mínima. (…) tiene que rehacerse”, dijo.

Sobre la polémica ZUT en Tibú, creada tras un acuerdo con el Frente 33 de las disidencias de las FARC, Petro insistió en que no se trata de una “zona de distensión”, sino de un proceso jurídico de paz: “El Frente 33 ha decidido concentrarse y avanzar hacia un proceso que implica entrega de armas y presencia en un territorio acordado”.

Petro advirtió que el mayor riesgo para esta zona es la presión del ELN: “Hay que defenderla del ELN, que no está interesado en la paz. Pero esa zona puede ser el eje para transformar la economía ilícita del Catatumbo en una economía progresista y lícita que proteja al campesinado”.

Finalmente, el presidente reveló que hay 40 mil hectáreas de hoja de coca en proceso de erradicación voluntaria, con pagos directos a campesinos. Según dijo, este tipo de medidas representan el verdadero desmonte de las causas estructurales de la violencia: “Nos centramos en el desmantelamiento de la economía ilícita como el factor clave de financiación de la muerte violenta en Colombia”.