Canelo Álvarez le ganó a William Scull y se coronó campeón mundial indiscutido del supermediano
El mexicano se impuso ante el cubano en tierras árabes.

(Foto de Richard Pelham/Getty Images) / Richard Pelham
La superestrella del boxeo mexicano Saúl ‘Canelo’ Álvarez volvió a unir los cuatro cinturones mundiales del peso supermediano al vencer por puntos al cubano William Scull el domingo en Riad (Arabia Saudita).
Al final de un combate decepcionante, Canelo recuperó de manos de Scull el cinturón de la Federación Internacional de Boxeo (FIB). Es importante mencionar, que el mexicano había renunciado a él el año pasado cuando se negó a enfrentar al cubano, el retador oficial, y prefirió chocar con el puertorriqueño Édgar Berlanga, a quien venció en septiembre en Las Vegas.
Sobre ser campeón del mundo
El mexicano de 34 años ya era poseedor de los cinturones del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), el de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y la Organización Mundial de Boxeo (OMB). En esta ocasión, los tres jueces dieron la victoria a Canelo, que mejoró su récord a 63-2-2 con 39 ‘knockouts’, en un combate en el que se intercambiaron pocos golpes.
Por otro lado, Scull, que sufrió a los 32 años su primera derrota (23-1), se mostró especialmente escurridizo, con un efectivo juego de pies pero incapaz de contraatacar.
Palabras de Canelo tras la pelea
“No me gusta boxear con ese tipo de tipos, solo vienen a sobrevivir. Un boxeador que no intenta ganar, que solo quiere sobrevivir, odio ese tipo de boxeador”, expresó Canelo en el ring tras el combate.
Próximo reto del boxeador mexicano
Ahora tiene una cita con el campeón estadounidense del peso superwelter, Terence Crawford, para un combate que se celebrará en Las Vegas el 12 de septiembre. El mexicano se refirió a su siguiente contrincante: “Crawford es uno de los mejores, va a ser un placer”
Finalmente, la pelea de este fin de semana fue la primera vez que Canelo peleaba fuera de Norteamérica en sus casi veinte años de carrera profesional. Recordemos, que Álvarez firmó en febrero un acuerdo de cuatro combates con la promoción saudí Riyadh Seasons, lo que lo convirtió en el último de una creciente lista de boxeadores que acuden al reino en busca de mega-pagos.



