Estaciones de Policía en Cúcuta, colapsadas por hacinamiento
Defensores de derechos humanos alertan sobre condiciones precarias y graves violaciones a los derechos fundamentales.

Estaciones de Policía colapsadas de privados de la libertad. / Foto: Cortesía.
Cúcuta.
El hacinamiento en las estaciones de Policía de Cúcuta ha alcanzado niveles críticos, en medio de una crisis carcelaria que se agudiza por la imposibilidad de trasladar a los detenidos a centros penitenciarios.
Actualmente, estaciones como Ospina Pérez albergan a 52 personas privadas de la libertad, mientras que Kennedy registra 44, Alfonso López tiene 45, y la estación Centro, 50 internos, cifras que superan por mucho la capacidad para la que fueron diseñadas estas instalaciones.
La situación se complica aún más debido a que la Penitenciaría de Cúcuta se encuentra también saturada, y no está recibiendo más internos. Según se ha conocido, el Inpec ha suspendido los traslados desde las estaciones de Policía debido al colapso del sistema penitenciario, dejando a los capturados sin posibilidad de ser reubicados.
Sandra Sierra, defensora de derechos humanos, advirtió que el panorama actual vulnera los derechos fundamentales de las personas privadas de la libertad. “Es una situación grave y persistente. Este hacinamiento extremo genera condiciones precarias que atentan contra la dignidad humana y la integridad personal. No hay espacios adecuados, no se garantiza la alimentación ni la atención en salud oportuna”, afirmó.
Sierra señaló que las estaciones de Policía, diseñadas para detención transitoria, no cuentan con los recursos ni las condiciones para mantener a personas durante periodos prolongados. “Estas personas están en un limbo, sin seguimiento ni garantías mínimas. Viven en condiciones de desagravio sin que el Estado preste la atención que corresponde”, agregó.
Frente a esta realidad, hizo un llamado urgente a entidades como la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo, el Ministerio de Defensa y el Gobierno Nacional para que se tomen medidas concretas y estructurales. “Se está vulnerando el derecho que les asiste incluso en condición de privación de libertad. Esta es una situación que no puede seguir siendo ignorada”, insistió la defensora.